El mes de noviembre finaliza con quince parados más en la provincia de Salamanca

El Ministerior de empleo y seguridad social hacía públicos esta mañana los datos del paro relativos al mes de noviembre, donde en términos globales de España, han sido negativos, pues ha aumentado el número de desempleados en más de 7.000. A nivel local, en Salamanca hay un total de 25.819, experimentando un ligero crecimiento de quince personas en el último mes. El dato positivo llega en la tasa interanual que experimenta una disminución respecto a noviembre de 2.016 del 8,52, o lo que es lo mismo, ha disminuido en 2.405 personas.

Los buenos datos llegan en el número de aficiliados a la seguridad social, que superan el centenar (2.256 a nivel interanual).

A continuación les ofrecemos en pdf los datos estadísticos registrados por el Ministerio.

Por sectores

Por sectores, el aumento del paro en la construcción sigue lastrando los datos. En concreto, en este último mes han aumentado los desempleados en 104, pasando de 2.180 a 2.284.

También han sido negativos los datos en agricultura, perdiendo 20 contratos y pasando de 771 desempleado a 791. Estos datos se han equilibrado con el aumento del empleo en el sector servicios, donde se ha pasado de 18.397 a 18.348, con una disminución de 49 personas. También son positivos los dsatos en industria, creciendo en trece empleos más.

Reacciones sindicales

No tardaron en producirse las primeras reacciones a los datos. Comisiones Obreras, a través de una nota pública indica que continúa siendo muy preocupante la situación laboral en nuestra provincia, sobre todo a estas alturas del año, con la campaña de Navidad encima y con la importante reducción en el número de contratos que se ha llevado a cabo.

Desde el sindicato se realta "con preocupación el importante descenso de contratos que se ha producido en este mes de noviembre", ya que "se han realizado un total de 8.623 contratos, 2.415 menos que en octubre, un 21.88%, sin duda esto habla de la inactividad y la tremenda escasez de empleo, además contando con que de estos contratos realizados, sólo un 1.28% ha terminado a final de mes con alta en la Seguridad Social. Este es el terrible porcentaje de precariedad en la contratación. 829 contratos indefinidos, un 9.61% y 7.794 contratos temporales, un 90.38%. Aún a pesar de ser reiterativos, nada está cambiando, precariedad, temporalidad y parcialidad son las notas dominantes en la contratación y en la escasa consolidación y estabilidad del pobre empleo que se genera en nuestra provincia".

También analizan desde CCOO que "la misma melodía suena con respecto a las prestaciones, la pobreza sigue instalada entre las familias y personas que continúan en desempleo. De las 25.819 personas registradas como desempleadas, 11.049 perciben algún ingreso, el 41.68% perciben prestación contributiva frente al 58.31% que reciben subsidios o ayudas. Siendo la media de la prestación 772.1?", lo que deja "un total de 14.770 personas, un 57.20%, que estando desempleadas no perciben ningún tipo de ingreso, seguimos manteniendo por tanto, unos índices de pobreza, desigualdad y exclusión social que no nos podemos permitir ni consentir".

En definitiva, señalan en la nota "la radiografía que se nos presenta sigue sin ser nada halagüeña, con cifras que nos siguen dando un diagnóstico de nuestra situación laboral y social marcado por la pobreza, por la desigualdad, por la precariedad y la falta de iniciativas, públicas y privadas". "La salida de la crisis, está siendo generadora de desigualdad, pobreza y precariedad", sentencian.

Por su parte, UGT incide en la precariedad del mercado laboral actual y señala que "estamos en 25 819 parados, 15 más con 111 altas a la Seguridad Social. Los distintos sectores varían según lo esperado por la época del año en que nos encontramos: hay 104 parados más en construcción, mientras que desciende sobre todo en el sector servicios, que se encuentra ya en precampaña navideña. Esa variación marcadamente estacional tiene efectos también en relación al género, pues se incrementa el desempleo entre los hombres y desciende entre las mujeres".

Cuantitativamente hablando, es el mejor noviembre desde 2013, -aunque no lo suficiente-, pero no podemos decir lo mismo de la calidad del empleo. Mientras desciende el paro, también lo hace la jornada de trabajo, pues 1 de cada 4 contratos son de fin de semana. La prueba es que 8623 contratos no han generado más que 111 altas de media en la Seguridad Social, y de ellas, un 45% son a tiempo parcial, señalan desde la central sindical.

La contratación indefinida, a pesar de aumentar hasta el 9,61%, es hoy más precaria, pues la presencia del contrato a tiempo parcial ha aumentado un 3,5% desde el 2013. El mercado laboral se rige hoy por una elevada precariedad y parcialidad, donde el escaso empleo se genera a base de distribuir la jornada, al menos en las nóminas. Hace 130 años, UGT nació luchando por la jornada laboral máxima de 8 horas, ahora luchamos por nóminas de 8 horas retribuidas, afirman.

CSIF

También la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) advierte de que estas cifras vuelven a reflejan además el abuso de la contratación de interinos y la precariedad en el empleo de nuestras Administraciones Públicas. Para CSIF estas cifras de interinidad no son razonables en ámbitos fundamentales de nuestro Estado del Bienestar. Además, ponen de manifiesto la necesidad de desarrollar el plan de estabilización en el empleo que se firmó el pasado mes de marzo con el Ministerio de Hacienda.

Sin embargo, CSIF ha constatado que las comunidades autónomas han recortado más de 64.000 plazas de las previstas en Sanidad y Educación, como consecuencia de la disparidad de criterios a la hora de determinar el empleo interino. CSIF manifiesta su preocupación por la disparidad de criterios entre las comunidades autónomas para determinar el número de plazas, por el retraso que se está produciendo en la convocatoria de las ofertas de empleo público y por la ausencia de proyecto de Presupuestos Generales del Estado para el próximo año. En este sentido, CSIF reclama al Gobierno que unifique criterios con las comunidades autónomas para garantizar que se estabilicen todas las plazas previstas y que garantice el desarrollo de las ofertas de empleo público, mediante la aprobación de un decreto en el Congreso de los Diputados, en el caso de que no sea posible aprobar unos presupuestos para el próximo año.