Regalar huevos de Pascua, una tradición que va a más

Aunque pueda parecer una tradición consumista como muchos pueden llegar a pensar, la costumbre de regalar huevos de chocolate los días de Pascua cuenta con una historia que ha convivido con diferentes generaciones durante varios siglos.

Su historia empezó debido a que los cristianos católicos que seguían la abstinencia de la Cuaresma no podían comer, entre otras cosas, huevos ni productos lácteos. Los seguidores de esta tradición guardaban los huevos, y para mantenerlos frescos los bañaban con una fina capa de cera líquida. Una vez terminada la Cuaresma, se reunían delante de la iglesia de su ciudad, y los regalaban. Con el tiempo, la iglesia católica fue cambiando las tradiciones, y hoy solamente recomienda la abstinencia de carne los viernes de la Semana Santa. El chocolate, por tanto, sí está permitido, y eso lo tienen muy en cuenta en Bombonería Sven.

Este negocio, ubicado en la Calle Wences Moreno, apuesta por defender esta tradición muy arraigada en Estados Unidos, el centro de Europa e Inglaterra, y ya tienen a disposición del público un gran surtido de estos huevos, en diferentes tamaños, con diferentes formas, bañados en chocolate negro, con leche o blanco. "Nuestros huevos de Pascua ya se han empezado a vender y ofrecemos tres modalidades. Por un lado los huevos rellenos de bombones, que se venden adornados con un lazo o una original caja; por otro lado, los huevos huecos que se decoran y se acompañan de diferentes muñecos como la tradicional mona de pascua, la gallina, etc, y por otro lado, como novedad, incorporamos a nuestro surtido de bombones unos con formas de huevo", explica Marcos Sevilla, gerente del establecimiento.

Aunque cuando este negocio abrió sus puertas hace más de 20 años esta tradición era para los salmantinos desconocida, la realidad es que hoy son muchos los que se acercan a comprar sus huevos de Pascua, algunos incluso llaman previamente para hacer reservas, y los más atrevidos, los han elegido además como regalo del Día del Padre. Al final, cualquier excusa es buena para degustar un buen chocolate, y ese placer saben cómo complacerlo en Bombonería Sven por la calidad de los productos y con la innovación en sus diseños y siempre sin perder la esencia del mejor chocolate.