PEÑARANDA | El acuerdo, cerrado semanas atrás, ha propiciado el desalojo de la antigua capilla, aunque el resto de instalaciones mantendrán su actividad con normalidad hasta la construcción del nuevo Centro Parroquial
Comienzan los primeros desalojos de material en diferentes estancias de las Jesuitinias, tras la formalización de los trámites que han avalado la venta del edificio a un empresario peñarandino.
Tal y como ha podido saber SALAMANCArtv AL DIA y BRACAMONTE AL DIA, el acuerdo de venta se habría realizado con total normalidad semanas atrás y en la actualidad se está desalojando lo que fue la capilla para que el nuevo dueño pueda comenzar a utilizar las instalaciones de manera inmediata. El resto de estancias y espacios del complejo, en el que se están desarrollando reuniones y las catequesis preparatorias para la Primera Comunión, continuaran con normalidad en este mismo lugar hasta que se ponga en marcha el nuevo Centro Parroquial de la calle Hernán Cortes.
Los movimientos en torno al nuevo dueño solo afectan al Taller parroquial de Costura, que desarrollaba su actividad en las estancias desalojadas, por lo que se ha trasladado su actividad hasta la casa parroquial con total normalidad.
PROCESO DE VENTA
Las Jesuitinas, un antiguo colegio de las Hijas de Jesús fundado en 1875, y en el que en la actualidad se desarrolla la práctica totalidad de la actividad católica local, ha sido protagonista de debate interno desde hace décadas.
Tal y como
recuerda Lauren Sevillano, párroco de la ciudad, dicho inmueble ya era planteado como Centro Parroquial años atrás, después de que el patronato de la fundación de doña Elisa Muñoz ofreciera sus instalaciones al Obispado de Salamanca. Dicho planteamiento se mantenía activo hasta la llegada de Sevillano, quien estudiaba la situación del complejo y optaba por plantear un nuevo emplazamiento para el Centro Parroquial, iniciativa que era analizada y aprobada por el Obispado, por lo que se cancelaba cualquier vía de negociación para una posible adquisición.
Desde ese momento comenzaban a solicitarse los permisos legales necesarios para sacar a la venta publica este emblemático edificio, que ha contado con todos ellos incluido el permiso del patronato de Fundaciones, indispensable para iniciar el cambio de manos, quien emitía un informe favorable sobre la operación al tratarse de un inmueble sin valor patrimonial ni contener ningún elemento considerado monumental.
Finalmente la operación se cerraba semanas atrás con total normalidad y el nuevo dueño ya ha comenzado el proceso de transformación de sus deterioradas instalaciones para uso empresarial, unas labores que se mantendrán limitadas a la espera de la llegada del nuevo Centro Parroquial para evitar así cualquier tipo de interrupción en las actividades que hasta el momento se están desarrollando en sus salones.
