El 2017 será un año lleno de retos, sueños e ilusiones para el deporte salmantino

Se acabó 2016 y comienza ya el 2017. Otro año en el que los retos, ilusiones y sueños de los clubes de Salamanca marcarán lo que puede ser un gran año o al revés. Cada uno en su diferente especialidad deportiva busca un objetivo, un objetivo marcado en septiembre, si bien luego la competición pone a cada uno en su sitio, y en mayo o junio se recogen las notas que dictan sentencia si lo has hecho o no bien.

Seis equipos marcan lo que está siendo la actual temporada, los que más seguidores arrastran y donde los aficionados se miran cada fin de semana. Ya sea baloncesto, fútbol o balonmano, cada uno intenta agradar a su 'parroquia' con el fin de que esos objetivos o sueños se cumplan.

Este año 2017 podría ser el mejor de la historia del Perfumerías Avenida. El club cumple 25 años en la élite del baloncesto femenino español y tiene entre ceja y ceja conseguir el triplete de títulos nacionales.

Ya conquistó la Supercopa de España en el pabellón de Würzburg y tiene equipo suficiente para doblegar a cualquier conjunto de la Liga. El próximo objetivo es levantar la Copa de la Reina, que en el último año se le ha resistido. Su mayor adversario será Girona, pero nunca se sabe con un torneo donde las sorpresas están a la orden del día. Ese será en febrero. Y dos meses después podría levantar una nueva Liga. Ahora es líder de la Regular con dos victorias por encima del segundo clasificado. Lo normal es que sea primero y tenga en los 'play-off' el campo a favor. Y ya se sabe como se las gasta Würzburg. Las cosas, porqué no decirlo, pintan bien.

El fútbol, un mundo diferente

En el balompié salmantino cuatro equipos alzan la voz con fuerza. Por orden de categoría habría que decir que el Guijuelo es el estandarte del fútbol en la provincia. Los verdiblancos vivieron hace unos días una experiencia inolvidable. Y es que no todos los equipos abren un campo de 20.000 personas para jugar una eliminatoria contra un equipo como el Atlético de Madrid, club que está en la Liga de Campeones. El sueño quedó borrado con un total en la eliminatoria de 10-1 para los colchoneros, pero la proeza se hizo y los que no conocían la camiseta del jamón ya saben que existe un equipo en Salamanca que es al menos, peculiar.

El año 2017 será un punto de inflexión en el Guijuelo. Metido de lleno en problemas deportivos. Actualmente está en puestos de promoción para no descender a Tercera, a Jordi Fabregat, su técnico, le queda un trabajo enorme por delante en una categoría donde todos los equipos 'muerden' para no verse abocados al pozo de Tercera.

El Guijuelo ha llegado a disputar un 'play-off' de ascenso y ahora, en las duras, necesita de una afición que está un poco desconsolada y decepcionada. La segunda vuelta de la Liga será complicada y los jugadores tendrán mucho que decir en los campos de juego. El último partido en casa fue coser y cantar ante el Palencia, pero tras la derrota ante el celta y Atlético las aguas vuelven a removerse con fuerza.

En Tercera navega Unionistas CF, club que tiene tres años de vida y parece que lleva 50 años en la brecha. Con más de 2.000 socios es uno de los equipos con más masa social de los clubes de Castilla y León. Siempre fieles al equipo gane o pierda se desplazan hasta donde sea con tal de ver a sus jugadores luchar del minuto 1 al 90. Parte de este éxito es de su técnico. Astu es de esos entrenadores que persiguen la unión del grupo por delante de intereses personales por muy buenos que sea los jugadores. Este hecho es clave en la vida de un colectivo, para sobrevivir o para estrellarse. Así ha sido siempre y así será siempre.

Unionistas camina ahora mismo en cuarta posición. Su reto es subir a Segunda B, lo que sería el tercer ascenso en tres años. Como ya lo hiciera en su día al club que homenajea, la UDS. En el último partido del año perdió en Segovia después de 54 partidos sin hacerlo y ha dejado un sabor agridulce para las fiestas de Navidad. La idea es volver a estar otros 54 partidos sin perder, esa es la filosofía del equipo, aunque es difícil, claro.

El próximo año se presenta como el mayor reto que tiene esta joven entidad. Un ascenso a Segunda B auparía al club a los altares y se diseñaría un equipo fuerte con la idea de seguir cumpliendo objetivos, que no serían otros que intentar el asalto a la Segunda División y entrar de lleno en el fútbol profesional.

Hasta ese momento que puede ser una gran fiesta para el club, habrá que pelear mucho en los campos de Tercera División. Sin lucha no hay gloria. Unionistas tiene un gran potencial deportivo y lo que demostrado en la primera vuelta del campeonato con 9 victorias, 9 empate y solo una derrota, la del pasado 18 de diciembre ante la Gimnástica. A ver qué sucede.

Una Regional de Aficionados salmantina

Esta temporada se han aliado los astros para hacer coincidir en una misma categoría a siete equipos de la provincia de Salamanca. Se puede decir que el Grupo B de la Regional de Aficionados es salmantina, o casi. Por encima de todos sobresale el Salmantino. Equipo que bajó a los infiernos, pero que está saliendo del pozo con trabajo, pasión y suerte. Suerte porque tiene como aliado al estadio Helmántico, un campo que para la mayoría de los equipos se les hace kilométrico en sus medidas y no aguantan el ritmo de unos jugadores habituados a los entrenamientos en este escenario.

María Hernández, su entrenador, lo dijo. "Tenemos que aprovechar el Helmántico, hacernos fuertes en él y con eso tendremos mucho ganado". Y así está siendo. Por el momento el Salmantino comanda la tabla con algunos seis puntos de ventaja sobre el Santa Marta y el Villa de Simancas, que son segundo y tercero, respectivamente.

El Salmantino sabe que solo puede ser primero para ascender ya que el segundo de este grupo lo tendrá complicado siempre y cuando no haya arrastres hacia Regional de otros equipos de superior categoría, pero eso no se sabrá hasta junio. Lo que sí es cierto es que el primero tiene premio y el Salmantino quiere desenvolverlo el antes posible.

En busca de la categoría perdida está también el Santa Marta de Tormes. Tras naufragar la pasada temporada y bajar a Regional, los del Alfonso San Casto buscan también el ascenso a Tercera. En las últimas semanas han tropezado en algunos partidos y los primeros se le han ido un poco en la tabla, pero las bases del equipo siguen siendo las mismas, fuerza, corazón y mucha cantera, que cuidan con mimo y donde existen jugadores desde las pequeñas categorías que pueden dar que hablar en el futuro. Y es que el Santa Marta lidera casi todo el fútbol base, con alguna excepción. Además tiene un equipo en la Liga Nacional Juvenil y otro en la Regional, lo que demuestra su potencial.

El resto de equipos salmantinos de esta categoría buscan su espacio sin perder la misma. El Béjar Industrial está realizando una gran temporada. Ahora son quintos. Le sigue por orden de clasificación el Peñaranda, octavo, el Carbajosa de la Sagrada, undécimo, el Ciudad Rodrigo, decimoquinto, y el Navega, último, pero con intención de salir de ese puesto tras la llegada al club de Gelu, que ya está dando sus frutos.

El poder 'naranja' del balonmano

El BM Ciudad de Salamanca ha tenido en el 2016 su punto álgido como entidad deportiva. El ascenso del equipo a Primera Estatal de balonmano es un hecho histórico de este deporte en Salamanca. Es más, los niños que practican balonmano en la ciudad se ha duplicado gracias a la fuerza 'naranja' que ha dado este club a la capital del Tormes.

Este 2017 será un gran reto. Sin duda, será el club que tenga la mayor dificultad para lograr el objetivo de la permanencia y la clave será el pabellón del Río Tormes, que se ha convertido en la particular catedral del balonmano salmantino. Los fines de semana que juega el BM Ciudad de Salamanca en este centro deportivo son como una fiesta. Es el club que arrastra más cantidad de aficionados de la toda la Liga de Primera Estatal y muchos partidos se terminan decantando para los locales gracias a la presión ambiental.

El BM Ciudad de Salamanca cabalga en la Liga en las últimas posiciones. De momento la última victoria ante el Colindres le hace respirar mucho en una competición donde se deberá pelear con cuatro o cinco equipos para evitar el descenso y por el momento está solucionando los problemas gracias a la fuerza y espíritu de sus jugadores. Lo que resta de campeonato será emocionante y se esperan grandes partidos en un Río Tormes que será una olla a presión para los rivales.

Texto: Ángel Arroyo