Don Quijote y Sancho ya están en la Plaza del Teatro Cervantes
BÉJAR | El conjunto escultórico realizado por Pedro Requejo es un reconocimiento por ser Béjar la primera ciudad nombrada en la novela más importante de la literatura española
El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Béjar ha inaugurado en la plaza del Teatro Cervantes dos estatuas de Don Quijote y Sancho realizadas por el escultor Pedro Requejo, presentado por el Alcalde de Béjar como un madrileño del barrio de Salamanca nacido en 1964, que estudió en la facultad de Bellas Artes de San Fernando, además de la carrera de la Escuela Oficial de Cerámica de Madrid y del oficio de la joyería. Sus obras son sobre todo en bronce y ha creado numerosos trabajos para espacios públicos. Este escultor ya es la tercera estatua que realiza en Béjar, la primera es la figura del Salamanquino, situada junto a la Plaza de Toros de El Castañar, la segunda la escultura "A ti mujer", colocada en la entrada de la ciudad y ahora esta composición de Don Quijote y Sancho Panza en la Plaza del Teatro Cervantes.
Alejo Riñones ha presentado esta obra escultórica ensalzando el valor del Teatro Cervantes y de la figura del insigne escritor, y también ha mencionado a la Casa Ducal de Béjar considerándola un ejemplo de nobleza al haber protegido a literatos y artistas "donde Miguel de Cervantes encontró el apoyo que necesitaba para publicar la más importante de sus obras", añadiendo que "Nunca sabremos si El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha habría visto la luz de no ser por la ayuda prestada por D. Alfonso Diego de Zúñiga y Sotomayor".
El Alcalde ha añadido que esta localidad siempre ha estado en deuda con la dedicatoria de la obra al Duque, convirtiendo a Béjar en la primera ciudad nombrada en la novela más importante de la literatura española, así como en una de las coronas poéticas que conforman las páginas preliminares de su inicio. Por eso se han realizado varios actos con motivo del IV Centenario de la muerte de Cervantes y hoy se ha inaugurado este conjunto escultórico como reconocimiento a su figura.
El escultor del conjunto, Pedro Requejo además de numerosos agradecimientos ha manifestado tener especial predilección por Cervantes, pues es la tercera vez que ha podido representar a su "héroe" Don Quijote, las dos primeras obras de esta temática las realizó para Alcalá de Henares con motivo del aniversario de la primera edición de la novela.
Requejo ha manifestado haber pensado mucho en el escritor, en el hombre y su azarosa vida y ha destacado dos elementos que considera dignos de ser resaltados, en primer lugar su vocación literaria que le llevó a tocar sin éxito todos los géneros "lo intentó todo, poeta, dramaturgo, comediógrafo y por fin el invento de la novela" añadiendo que "en esta sociedad de ninis?D. Miguel nos recuerda el valor de la vocación, del amor a una profesión y la voluntad de intentarlo una y otra vez, la capacidad de reinventarse. Al final de lo que cualquier otro creería que era el fin de su vida, nada más y nada menos que en la cárcel de Sevilla, ahí empezó a escribir el Quijote, cerca ya de la cincuentena" y continúa en segundo lugar "De aquella amargura saca un baño de alegre locura, otro canto a la vocación tardía, en este caso al mundo de las armas que en tanta estima tenía el veterano de Lepanto, otra lección que sacar para nuestra sociedad, donde en una reciente encuesta se pone de manifiesto que tan sólo el 16 % de nuestros jóvenes estaría dispuesto a defender por las armas su patria".
El escultor continúa añadiendo que Cervantes se ríe de sí mismo y envía a cumplir sus sueños de caballero andante a otro "cincuentón" y considera una gran oportunidad para él, que también está en la cincuentena, valorar su vocación de niño y agradecer este homenaje y el gran estímulo que ha supuesto para él su figura, para poner su ilusión, fuerza y voluntad en esta obra.
El acto ha finalizado con una pieza de música interpretada al violonchelo por el hijo del escultor, Santiago Requejo y con un vino de honor en la entrada del Teatro Cervantes.