El Martes Chico confirma su éxito creciendo en contenido

A la hora de publicarse esta información (las 17.30 horas), Ciudad Rodrigo está todavía disfrutando de la 2ª edición de su Martes Chico, en la cual se ha confirmado el éxito del evento nacido el año pasado a modo de exaltación comercial fuera de murallas, concretamente, en el entorno comercial del Parque de La Glorieta, que concentró la actividad de la ciudad durante la mañana (aunque el mercado de los martes de la Plazuela del Buen Alcalde funcionó prácticamente con total normalidad).

Dentro del propio Parque de La Glorieta, y por las calles Laguna, Lorenza Iglesias, San Fernando, parte de la calle Santa Clara, Valera, Cárcabas y un tramo de la Avenida de Béjar se repartieron desde primera hora de la mañana del martes hasta 190 puestos, de los cuales 115 pertenecían a mirobrigenses mientras que los restantes 75 eran llegados de fuera (en este caso de artesanía variada).

Todos esos puestos tuvieron un gran movimiento durante toda la mañana, consolidándose de esta forma la iniciativa del Martes Chico, que incluso ha crecido con interesantes novedades. Quizás la que más se ha dejado sentir es la musical de la mano de la Charanga Manliao, que recorrió a partir de las 12.00 horas todas las calles sede de la celebración, gracias a la colaboración económica de una treintena de establecimientos de la zona. La Charanga hizo principalmente paradas en los bares que habían sacado sus barras a la calle.

Dentro de las novedades musicales, también destacaron las exhibiciones de batuka y zumba que realizó la Asociación Muévete a la puerta de su sede en la calle Peramato, donde también desarrollaron una batalla a base de globos de agua. Los niños tuvieron bastante protagonismo en el Martes Chico, ya que, además de haber varios puestos regentados por niños, pudieron montar en hinchables situados en el Parque de La Glorieta, donde también hubo un pony para que los más pequeños dieran breves paseos.

Cerca de allí, estuvo firmando ejemplares de sus Memorias el ex alcalde de Ciudad Rodrigo, Miguel Cid Cebrián, en la calle Lorenza Iglesias (a las puertas de las librerías Nova Express y Garzón), donde nació y vivió sus primeros años.

Miguel Cid saludó de forma especialmente efusiva a antiguos vecinos del barrio y también a la Corporación Municipal, que desarrolló la habitual visita institucional a media mañana, durante la cual también tuvieron tiempo para pararse a tomar una caña al igual que estaban haciendo cientos de mirobrigenses, que intentaban de esta forma aliviar en parte el intenso calor que hizo durante toda la mañana.

En los bares que tenían barras en la calle se congregaron numerosos jóvenes, aunque una vez más el gran punto de concentración de la juventud durante la mañana fue el parque de la parte trasera del Valle de San Martín, donde desarrollaron un macrobotellón en buena armonía (y con algo menos de asistencia que el año pasado).

En torno a las 15.30 horas, los jóvenes comenzaron a marcharse del lugar para comer y continuar posteriormente la fiesta en algún que otro establecimiento hostelero. Al menos unos cuantos grupos de jóvenes, como las peñas Superbebientes y El Disloke, se preocuparon de recoger la basura que habían generado antes de marcharse.

La siguiente cita colectiva del Martes Chico será a partir de las 23.00 horas, con el concierto de la Orquesta SMS en la confluencia de las calles Laguna y Lorenza Iglesias.