Guillermo Fouce: Otro mundo es posible… si lo construimos entre todos

La Semana de la Solidaridad en el IES Mateo Hernández ha contado el jueves 25 con la presencia de Guillermo Fouce, presidente de la Fundación Psicólogos sin Fronteras, investigador, profesor de la universidad Carlos III y educador que ya sorprendió al público salmantino con su conferencia en la Universidad Pontificia acerca de su trabajo.

Miguel Ángel González, organizador de los actos, presentó a Guillermo Fouce como un hombre comprometido política y socialmente, un intelectual cuyas muchas publicaciones le convierten en un intelectual que, sin embargo, está al pie de la calle trabajando en su medio con adolescentes utilizando la música. El alumnado del IES Mateo Hernández, ha tenido la suerte de comprobar cómo trabaja Fouce, convencido de que otro mundo es posible y decidido a divulgar su idea de que hay que construir este mundo nuevo entre todos.

Fouce no es un conferenciante al uso, habla directamente al público, pregunta, indaga y sobre todo, pone música, música para utilizar un lenguaje que puedan entender los jóvenes y con el que se identifican. Su trabajo consiste en mostrar a través de esa música qué mundo vivimos y dejar que cuestionemos si verdaderamente nos gusta o no? música que nos muestra que no nos gusta la injusticia, la desigualdad? realidades que también enseña con datos matemáticos, con ejemplos sumamente didácticos para que todo el mundo lo entienda? realidades contra las que hay que rebelarse mostrando que también otras personas están luchando por ese mundo posible.

Fouce imparte talleres en los que las canciones se convierten en una forma de expresión con la que identificarse y a la qué cambiar cuando lo creemos necesario. No existe la pasividad para Guillermo Fouce y empuja a sus oyentes a implicarse, a conocer la realidad por dura que sea y sobre todo, a concienciarles de que pueden cambiarla. Su discurso es directo, fuerte, contundente y anima a la acción, una acción que se niega al acomodo y al hecho de que, como mostró una de las alumnas, concienciar a unos pocos que le escuchen no cambia las cosas. Profundamente empático y cercano, Fouce convenció a los oyentes de que no importa que sean pocos los concienciados? aquellos que escuchan esta música con la que nos preguntamos si verdaderamente todo puede continuar de esta manera. A través de letras concienciadas y música cercana a los oyentes, los jóvenes de los talleres de Fouce toman las riendas de su pensamiento y deciden si acomodarse o luchar por cambiar la realidad. Una realidad que muestra a través de la música, a través de su palabra, a través del gesto generoso de venir a un instituto para hablar con los alumnos. Un gesto solidario que nos muestra que, verdaderamente, con gente así, otro mundo es posible, un mundo donde cambiar aquello que no nos gusta.