La Consejería de Medio Ambiente autorizará en breve abatir otro lobo en la zona de Arribes

Ante los constantes ataques de lobo que se vienen produciendo sobre explotaciones ganaderas de municipios pertenecientes al partido judicial de Vitigudino, a petición del Servicio Territorial de Medio Ambiente de Salamanca, la Consejería de Fomento y Medio Ambiente autorizará en breve abatir otro lobo en esta zona, según han asegurado a este diario responsables de este departamento en Valladolid.

Según la misma fuente, la Consejería será la encargada de expedir esta autorización para abatir un ejemplar de lobo en la zona sur del Duero, territorio en el que la especie carece de aprovechamiento cinegético por estar protegida por la normativa comunitaria, de ahí que sea la cuadrilla de Control del Lobo la encargada de llevar a cabo la autorización.

Esta medida se toma en el marco de excepciones que contempla la directiva Hábitats y la Ley de Patrimonio Natural cuando se dan casos de continuos ataques al ganado, como ha venido explicando este diario. El último de estos ataques se registraba ayer miércoles en la localidad de Guadramiro y se saldaba con ocho ovejas muertas y 14 heridas.

Abaduero aglutina a más de 300 ganaderos

Por otro lado, la noche pasada ganaderos de las zonas de la Ramajería y Arribes se reunían en la localidad de La Vídola a la llamada de Abaduero, asociación que aglutina a más de 300 ganaderos, y que manifestaban su indignación por la ineficacia de las medidas adoptadas por la Junta, tanto para controlar las poblaciones de lobo como en el sistema de indemnizaciones a los ganaderos afectados por los ataques.

Tras este primer encuentro con los ganaderos, en el que los responsables de esta organización explicaron la situación actual sobre la gestión del lobo al sur del Duero, Abaduero tiene convocada para hoy una nueva reunión en Lumbrales a la que están invitados todos los ganaderos de la comarca del Abadengo.

El objetivo de estas reuniones, además de su carácter informativo, es el de constituir mesas de seguimiento sobre los ataques que se producen y coordinar actuaciones conjuntas como medidas de presión para que la Consejería de Medio Ambiente actúe en defensa de las explotaciones ganaderas.