La importancia de la autoconfianza

Desde 0 a 6 años los padres debemos desarrollar la confianza del niño en sí mismo, el pequeño depende fundamentalmente del adulto, y de los métodos que emplea en su educación, no obstante es muy importante, que el niño tenga una disposición positiva de querer realizar acciones con alegría y mucha seguridad, mostrarse tal cual es, y expresar que siente y piensa, de esto va depender la confianza en sí mismo.

El educador debe permitir que el pequeño se exprese e intercambie con él sus vivencias, que actúe siempre con naturalidad, que las tareas las acepte con disposición y agrado, en definitiva tratar de establecer una relación adecuada.

Para desarrollar la confianza en él, debemos brindarle la posibilidad de actuar por sí solo, de llegar a resultados satisfactorios en cada actividad, para eso al preparar las diferentes materias, todas han de tener un punto de partida, quien educa es obligatorio que sepa hasta dónde puede llegar el niño, según su desarrollo real y potencial, lo que necesita hacer y lo que quiere lograr que él haga, y por supuesto, a donde debe llegar, dados los objetivos planteados en el programa.

A medida que el niño va siendo independiente en cada tarea, más confianza tendrá en sí mismo, lo que quiere decir que llegará a independizarse antes.

Otro punto importante, es la adecuada y justa valoración que hace el adulto del niño, y de sus actividades, este es un factor importantísimo para su buen estado emocional, el niño siempre espera la valoración del adulto, que es su modelo y quía en la adquisición del conocimiento; si lo valora injustamente o inapropiadamente, con métodos que dañen su estima, pierde la confianza y crea problemas emocionales fuertes.

Es necesario valorar y elogiar siempre, me refiero también con el adulto, el tema conseguir seres seguros para nuestra sociedad, si algo sale bien, se dirán palabras sanas y agradables, sabiendo del esfuerzo que realizó, si algo no está perfecto o no salió bien, animarle con buenos modos y gestos a que siga intentando mejorar, seguramente mañana saldrá mejor. Fuera menosprecio, fuera palabras duras y recias; una frase agradable, es más y mejor premio, que un diploma o una golosina, incluso que la mejor de las chuches.