El mirobrigense Manuel Molinero gana el I Certamen de Noticias de ‘Muy Interesante’

El periodista mirobrigense Manuel Molinero Rivero se ha alzado con el primer premio en el I Certamen de Noticias de Ciencia Ficción convocado por la Fundación Escrituras con la colaboración de la revista Muy Interesante y de Talleres de Escritura Fuentaja. El Certamen proponía imaginarse una noticia que ahora mismo sea ficción pero que en el año 2050 pueda ser realidad.

De entre los 463 relatos presentados, el de Manuel Molinero ?titulado Una cirugía para ricos: ¡que les corten la cabeza!- fue escogido como el mejor tanto en la categoría de Salud como a nivel global. El texto del periodista mirobrigense ?que se puede encontrar íntegro más abajo- describe un trasplante de cuerpo entero, accesible solo para los mejores bolsillos, en el cual se conservaría la esencia de cada ser humano (ya que se mantiene la cabeza) pero cambiando de cuerpo.

Según explicó el jurado del certamen en su fallo, el relato ganador anticipa un hecho "que con los pasos dados hasta la fecha no resulta tan inverosímil". A la hora de la realización del artículo, se subordina el relato de los acontecimientos "a una consideración ética final que intenta desmontar la justificación humanitaria y filantrópica del cirujano haciendo hincapié en su carácter exclusivo y en los intentos fallidos".

Asimismo, se destaca que el relato funciona "casi como un artículo de opinión, sacrificada la inmediatez de los hechos para incorporar al relato las reacciones producidas y las distintas declaraciones de los afectados, con las que el autor parece tomar partido". En líneas generales, el jurado lo define como "una buena historia, bien escrita y muy cuidada". El texto será publicado en el número de septiembre de la revista Muy Interesante, dentro de la sección 'Mi Muy'.

Manuel Molinero, que está trabajando en su primera novela, indica que disfruta de la escritura "sin necesidad de aplausos", pero que ganar un concurso de este tipo supone "una gran satisfacción personal, y también, un estímulo para continuar acumulando esfuerzos en un camino tan difícil como el de la literatura".

Licenciado en Periodismo por la Universidad Pontificia de Salamanca y en Ciencias Empresariales por la Universidad de Salamanca, Manuel Molinero, nacido en 1986, pasó por las redacciones de Punto Radio, Televisión Castilla y León y Cadena SER en Salamanca, hasta dar el salto a Madrid. En Onda Cero, firmó durante tres temporada la sección No tengo palabras en el Matinal de Noticias Fin de Semana. Centrado en el ámbito sanitario, ha intervenido en programas de televisión y radio especializados en salud del Grupo Atresmedia.

Una cirugía para ricos: ¡Que les corten la cabeza!

«¡Que le corten la cabeza!», debió de pensar el doctor Landon Stewart justo antes de ordenar que decapitasen al donante. «Adelante», dijo en realidad la versión masculina de la Reina de Corazones de Carroll que, en lugar de condenar a muerte, condena a vida eterna. Para unos, una suerte de Prometeo moderno; para otros, un pecador sin perdón de Dios: el neurocirujano angelino se ha convertido, a base del éxito trágico que supone en Medicina el reprobado método "prueba-error", en un dador de vida.

La cabeza de Andréi Sychov entró en quirófano ya separada de su cuerpo, conectada a una innovadora tecnología que administra oxígeno al cerebro y un gel nutritivo de células madre, ácidos grasos esenciales, vitaminas, alfahidroxiácidos AHA y retinol al resto de estructuras cefálicas.

Todos los hogares del planeta estaban pendientes del trasplante de cabeza, en directo. Los patrocinadores habían invertido auténticas fortunas para que su logotipo apareciese en el momento oportuno, porque todo parecía indicar que, esta vez sí, la operación iba a ser un éxito. Y lo fue.

El Dr. Stewart unió la médula espinal del paciente y millones de terminaciones nerviosas con el ya conocido como 'compuesto Stewart' y, tras doce horas en quirófano y dos días en coma inducido, Sychov abrió los ojos. Sesenta días después, el multimillonario ruso completo su rehabilitación. Y a las pocas semanas, sonreía en prime time con su nuevo cuerpo -apolíneo y anónimo-, a razón de quince millones de euros.

Al octogenario Sychov no le gustaba su antiguo cuerpo, pero pudo permitirse comprar uno más joven: la vida eterna. Según el Dr. Stewart, ha conseguido alargar su existencia unos cuarenta años.

«Hay que superar el miedo, la tragedia y, a veces, la moral para avanzar», respondió el Dr. Stewart al ser preguntado sobre los veintidós pacientes que fallecieron con anterioridad en su quirófano. «Ahora podemos darle un cuerpo a una persona paralítica», dijo. Pero Sychov no sufría parálisis espinal ni nada semejante, simplemente tenía dinero, mucho dinero. ¿Quién puede realmente acceder a esta cirugía tan cara? Hoy, muchos ricos quieren un nuevo cuerpo: ¡Que les corten la cabeza!