El PP considera que la ciudadanía quiere mayoritariamente que gobiernen ellos con pactos

El candidato del Partido Popular a la Alcaldía de Ciudad Rodrigo, Marcos Iglesias, ha publicado en las redes sociales una larga reflexión, "con total humildad", tras lo acontecido el pasado domingo en las Elecciones Municipales, que han dejado al PP con 7 concejales frente a la mayoría absoluta que tenía este partido hasta ahora.

Subrayando como punto de partida que el PP "ha obtenido el respaldo mayoritario de los mirobrigenses", Marcos Iglesias reflexiona que han tenido unos resultados que les permitirían gobernar en solitario, pero "está claro que la sensibilidad de los electores en todo el país indica que lo que se quiere es que el PP gobierne, pero hablando y consensuando con otras fuerzas políticas".

Según apunta Marcos Iglesias, ésa es su interpretación de las urnas, y lo que les están transmitiendo durante estos días "quienes nos han votado y buena parte de quienes no". Desde su punto de vista, "los mirobrigenses quieren mayoritariamente" que gobierne el PP, "con acuerdos puntuales o más estables con otras formaciones políticas".

Respecto a estos posibles pactos, el candidato del PP indica que están "abiertos al diálogo y a garantizar la estabilidad política del municipio", siendo sus máximas "la tolerancia y el consenso". La otra alternativa que se presenta en la sesión de investidura ?una unión tripartita de PSOE, IU y Ciudadanos- sería "más inestable que la nuestra", apuntando que cualquier opción que se produzca "es de por sí inestable".

El PP considera que la opción de que ellos gobiernen es con la que más se puede "integrar y sumar", ya que son los que más puestos de concejal y votantes tienen. Asimismo entienden que "lo más democrático" sería que ellos gobernasen.

A la hora de la relación con otras formaciones, el PP indica que tienen "varios límites". El primero de ellos es que "debe primar el interés de Ciudad Rodrigo por encima de todo". Desde su punto de vista, el proyecto del PP "sería integrable" con el de otras formaciones "siempre que el objetivo sea Ciudad Rodrigo y no los personalismos".

En ese punto, Marcos Iglesias recuerda que todos los que se han presentado en su candidatura lo han hecho con el deseo de "trabajar por Ciudad Rodrigo", siendo también la principal motivación que le llevó a él mismo a aceptar encabezar el proyecto del PP, tras reflexionarlo intensamente, porque "la asunción de cualquier responsabilidad política me ralentiza mi sueño profesional".

Por otro lado, el PP pide "respeto" a la voluntad mayoritaria de los mirobrigenses, es decir, a que gobierne ese partido "con apoyos puntuales o estables desde un inicio". En este sentido recuerdan que casi doblan los votos a la segunda formación más votada.

Desde su punto de vista, en Ciudad Rodrigo "no vale el todos contra el PP, porque aquí no hay razones para ello", ya que de hecho se ha producido una renovación completa de la lista popular: "no vale reprochar nada". Pase lo que pase finalmente, Marcos Iglesias expone que estará junto a los suyos "siempre al servicio e interés de Ciudad Rodrigo".

Esta es la reflexión íntegra publicada por Marcos Iglesias en las redes sociales:

Con total humildad deben explicarse varias cosas.

Nuestra formación política ha obtenido el respaldo mayoritario de los mirobrigenses. No hemos obtenido los resultados que nos permitirían gobernar nosotros solos, pero está claro que la sensibilidad de los electores en todo el país (no sólo en Ciudad Rodrigo) indica que lo que se quiere es que el PP gobierne, pero hablando y consensuando con otras fuerzas políticas.

Es nuestra interpretación de las urnas, y es la impresión que obtenemos de nuestro contacto constante en la calle, pasadas ya las elecciones. Impresión de quienes nos han votado, y de buena parte de quienes no; eso es lo que nos transmiten. Los mirobrigenses quieren mayoritariamente que gobernemos nosotros, con acuerdos puntuales o más estables con otras formaciones políticas. Somos flexibles. Nuestra máxima es la tolerancia y el consenso. No creo que encuentren personas más tolerantes y abiertas al diálogo que quienes integrábamos la candidatura del PP a estas elecciones.

Nosotros estamos abiertos al diálogo y a garantizar la estabilidad política del municipio. Para nosotros, otra alternativa (que pasaría necesariamente por la unión tripartita del resto) sería más inestable que la nuestra. Reconocemos que cualquier opción es de por sí inestable, pero somos la que más podemos integrar y sumar, entre otras cuestiones, porque somos la que más escaños y electorado detrás tenemos. También, el que nosotros gobernáramos sería lo más democrático.

Nosotros como opción política tenemos varios límites:

1. Debe primar siempre el interés de Ciudad Rodrigo por encima de todo. Aquí es dónde se verá dónde estamos cada cual. Nosotros hemos presentado un proyecto político que sería integrable con el de otras formaciones siempre que el objetivo sea Ciudad Rodrigo y no los personalismos.

Hago un paréntesis sobre los personalismos en política: Podría hablar del currículum personal y laboral de todos los que me han acompañado, de todos, pero tengo que detenerme en quienes hemos obtenido representación. De los 7 que hemos obtenido representación, los 7 trabajamos o están jubilados. Seremos más o menos guapos, más o menos listos o más o menos simpáticos. Pero lo cierto es que nos ha movido sólo una cosa, trabajar por Ciudad Rodrigo, sólo eso, trabajar por nuestra ciudad. Quisimos buscar una lista integrada por diversos perfiles, una lista que aun nueva, supiera de lo que hablara, y hablara sólo de lo que sabe, que pienso que es mucho. Personas conocidas y reconocidas en nuestra ciudad.

Cuando a mí se me propuso encabezar este proyecto, la reflexión que tuve no fue nada fácil. Ante una vida laboral más o menos encauzada se me ofrecía la posibilidad de ser el alcalde de mi ciudad. Para mí, laboral y familiarmente era el peor momento. No contaba con la comprensión de mis más próximos, especialmente de mi familia, entre ellos de mis padres y de mi novia. Tampoco contaba con la comprensión de mi maestro, el Catedrático de Derecho Financiero, quien me hacía reflexionar (con dureza) entre una vida académica de éxito y una vida política condicionada al parecer de cada 4 años.

Reflexioné y reflexioné. Volví a reflexionar. Tengo que decir que aquel período de reflexión fue uno de los peores momentos en mi vida. Si hubiera tenido una ambición desmesurada hubiera aceptado al instante de haberme sido propuesto. Los que lo sabían vieron lo que yo pasé, y pueden dar testimonio de esto. Días de angustia intentando decidir qué tenía que hacer; días donde no sabía si para mí y para los míos era lo mejor. Era comprometer incluso a mi familia y ponerla en el disparadero de la crítica fácil y de la verborrea cruel.

La asunción de cualquier responsabilidad política me ralentiza mi sueño profesional. Acepté por la ilusión que me hacía el poder trabajar por mis paisanos, por el lugar donde he nacido y me he criado. Y acepté con una sola condición, en tanto que pudiera, no quería dejar mi trabajo. Y puse esta condición para ser siempre libre, para que el día en que yo viera que no diera ya más de mí, irme silenciosamente a mi trabajo, que por cierto, me apasiona y donde me encuentro muy feliz. Para poder irme de esta manera en un futuro considero que no puede ser en este momento opción la renuncia a mi vida profesional.

Si soy elegido alcalde, podría tirar mi vida profesional a la borda por un proyecto político, pero nunca lo he querido, y lo he anunciado desde el primer momento, pues ante todo debo estabilizarme en mi trabajo. Podría haberme planteado dejar de ser el último mono en la Universidad, como lo soy (para ser el último mono en la Universidad se necesita tener un currículum un tanto pesado), pero jamás me planteé dejar de serlo. Decidí dar el paso, siempre y cuando buscáramos fórmulas para compatibilizar trabajo y política, fuera cual fuera el resultado. Opté por lo difícil, como todos los que me han acompañado y me acompañan.

Quiero decir que me mueve, como a mi equipo, hacer bien las cosas, en lo que podamos y sepamos. Nada más. Cierro el paréntesis.

2. Respeto a la voluntad mayoritaria de los mirobrigenses, que ya digo, pasa porque nosotros gobernemos con apoyos puntuales o estables desde un inicio. Somos la formación más legitimada, no sólo por ganar las elecciones, sino porque incluso la diferencia con la segunda fuerza más votada es significativa, en concreto, la diferencia es de 1433 votos. Y esto me parece relevante.

No sabemos qué pasará. Otros ya han anunciado públicamente que con nosotros no quieren entenderse. Tendremos pinta de diablos con cuernos, rabo y tridentes... Pienso que en Ciudad Rodrigo no vale el todos contra el PP, porque aquí no hay razones para ello. No las hay, claro que no. Aquí ya no vale el argumento que en otros lados se lanza de regeneración política, pues vaya que la ha habido. Somos todos nuevos, por si no se habían enterado. No vale reprochar nada, pues no tenemos nada más a las espaldas que nuestra vida, la familiar y la profesional.

Y termino. No sé si seré el alcalde de nuestra ciudad. Pero si tanto lo soy como no, tened la seguridad de que yo estoy tranquilo, y estaré, junto con los míos, siempre al servicio e interés de Ciudad Rodrigo.

Recibid un fuerte abrazo, quienes me habéis apoyado, y también quienes no.