De cerdos y hombres

Antonio vive con su hermano Jesús, en pleno campo salmantino muy cerca del límite provincial con Cáceres, sus relaciones con el ruidoso mundo urbano son nulas, aun así están perfectamente informados de lo que les acontece a sus iguales más próximos y al resto del mundo, aunque eso les importe más bien poco.

Octogenarios acostumbrados a las relaciones con los animales, cabras y vacas, gallinas y ocas, caballos?y los clásicos de los urbanitas gatos y perros, no con el mismo fin ni en las mismas condiciones, pero se nos antoja que bastante mas felices recorriendo el campo y sin ningún tipo de restricción.

Como prueba de que las modas no son propiedad de ningún pueblo ni de ninguna época ahora Antonio tiene un nuevo animal de compañía, una cerda de pocos meses que más parece un perro pastor que un bicho destinado a acabar en una mesa de matanza. Moderno donde los haya, Antonio parece un George Cloony cuando pasea con su cerdo, aunque este no sea vietnamita.

Que las costumbres son fruto de las relaciones con los otros y de quien nos eduque lo demuestra el comportamiento de está cerda, que como si de un cánido se tratase así actúa, fruto de su relación con los dos perros pastores que acompañan a Antonio en sus quehaceres diarios.

Si un cerdo casi se llega a convertir en un perro (solo le falta ladrar) los inteligentes humanos deberían poner mucho cuidado en como se comportan primero ante su descendencia y después ante los demás, que las conductas se aprenden y se repiten.

Será por eso que en los tiempos que corren, y fruto de empapuzarnos de vomitivos programas televisivos, en los que analfabetas botoxtizadas dan muestras de su disminuida capacidad para todo lo que no sea soez u ordinario, pero venden miles de libros, son el modelo a imitar de cientos de jóvenes desorientados.

Mañana la cerda seguirá retozando con los canes y las cabras sin saber que su condición debería ser otra, lo que quizá la salve de acabar embutida y degustada, tal y como seguro acabarán todos esos adolescentes que se creen que ser un ignorante es para presumir porque hay gente que se hace rica con ello.