Miedos, niños y lectura

Los miedos infantiles no son fáciles de explicar. En nuestra cultura, si hacemos un poco de memoria, incluso ahora también, se puede observar que los padres usan estos miedos y juegan a esconderse para que el niño crea estar perdido, o asustan con el "coco" para conseguir que les obedezca.

Pero?¿Qué es el miedo? ¿Qué recomendaciones de lecturas podríamos dar a los padres, educadores, profesionales? La literatura es un campo infinito donde resulta muy complejo establecer límites entre lo que está y no está en relación con los miedos. Y haa estado unida, tanto de manera oral como escrita, a los miedos de la humanidad.

León Felipe advirtió que "el miedo del hombre ha inventado todos los cuentos". El hecho de narrar, escuchar, leer y escribir historias es un tipo de encanto contra el miedo. Es un tipo de magia contra esos miedos infantiles, y más cuando ese conjuro procede de los padres. Desde el afecto, el cariño y el mimo. Y es ahí cuando uno se encuentra a salvo. Quién no ha temido alguna vez a los monstruos que se esconden bajo la cama, en el armario o detrás de la puerta. Al lobo, a la noche, a los ruidos, o a la oscuridad.

Hoy queremos compartir con todos vosotros algunas sugerencias que tienen como tema principal los miedos infantiles, y así, disponer de una serie de recursos para ayudar a los niños a explicarles por qué sienten miedo y ayudarles, poco a poco, a desmontar sus temores permitiéndoles superar esa etapa.

Para los que se asustan de los monstruos os sugerimos "Una pesadilla en mi armario" de Mercer Mayer (Kalandraka, 2001); para los que temen al lobo, "Los tres cerditos" de Raquel Méndez & Helga Bansch (OQO, 2009); para los que sienten escalofríos ante los sonidos desconocidos os animamos a leer "Ruidos bajo la cama" de Mathis (Adriana Hidalgo Editora, 2009); para los que sienten inquietud con la oscuridad, "Los monstruos tienen miedo de la luna" de Marjane Satrapi (Norma Editorial, 2009) y para lo que se sobrecogen cuando llega la noche "¡Papá!" de Philippe Corentin (Corimbo, 1999).

Y no olvidéis acabar la lectura con la formula mágica: "Colorín colorado, este cuento se ha acabado". Así los niños sabrán que aquello a lo que temen se quedó en el libro. Felices sueños.