Y a mí me llaman insociable (I)

Me he propuesto desmontar, con ejemplos más que verídicos, el mito del "individuo sociable". Ese al que conoce mucha gente y que presume de conocer a mucha más, el alma de las fiestas, el que va por la calle saludando a diestro y siniestro, el que presume sin creerse que lo está haciendo, el que cuando habla sube el pan, el envidiado y/o admirado, el super guay. Ese individuo al que me voy a referir a partir de ahora como el figura.

El problema es que a la masa humana, como masa que somos, nos confunde un traje bien cortado, por una sonrisa de anuncio, o por un "buenos días" que suena a ópera de Verdi.

Alguien me dijo una vez que la primera regla de la convivencia era NO MOLESTAR, y tenía toda la razón. Pero si miramos bien debajo del brillo que le envuelve, el figura molesta, y molesta adrede, por la simple razón de le importamos un cuerno, nosotros y la sociedad entera.

Para que nadie se sienta ofendido, quiero aclarar que el figura puede ser tanto él como ella, la insociabilidad verdadera no distingue entre sexos.

El figura y la música. A quién más y a quién menos le gusta la música, en eso estamos de acuerdo. En lo que también deberíamos estar de acuerdo es en que hay muchísimos tipos de músicas y en que no a todos nos gustan las mismas.

Pues no, el figura parte de la base de que a todo el mundo le tiene que gustar SU música.

Ejemplo: Enero en el norte de la meseta norte, 4 grados bajo cero a la hora punta de ir al trabajo. El figura sale de su casa perfectamente maqueado, saludando a todo el mundo con exquisita amabilidad, se mete en un coche impecablemente limpio y sin un rasguño, arranca y se incorpora al atasco habitual de esas horas de la mañana. Y ¿qué hace el figura para matar el rato? Pone en la radio del coche su CD preferido, sube el volumen a la máxima potencia, y baja a tope la ventanilla del coche, arriesgándose a pillar una pulmonía, para que todos los transeúntes, conductores, y vecinos de varias manzanas a la redonda puedan disfrutar de los 8 altavoces tuneados que tiene y de su dudoso gusto musical.

Y seguro que en su casa dicen que es un chic@ muy sociable.