El montaje de los fuegos artificiales llevó el caos al entorno de La Pesquera

Sin embargo, el lanzamiento también tuvo su cara negativa: los problemas de tráfico que se generaron durante el horario diurno. Como es habitual, los fuegos artificiales se lanzaron desde los aledaños de la isla de El Picón, en el espacio que se emplea como aparcamiento de vehículos ?repartiéndose al igual que el año anterior por el espacio delimitado 'oficialmente' como parking-.

Ello provocó que en la jornada del domingo, uno de los días 'centrales' del verano 2014, no se pudieran usar el centenar de plazas del aparcamiento, generando un notable quebradero de cabeza a todos aquellos que se acercaron al entorno del río con sus vehículos, y al mismo tiempo, un gran caos a la hora de intentar aparcar.