Llegados a este tiempo de verano y pasado ya el boom del fútbol, suelen aparecer entre las noticias las llamadas serpientes de verano. Faltan noticias de calado y entonces hay que inventar sucesos de menor importancia, que no tienen cabida en otros momentos de la información, pero que sirven ahora para rellenar tiempos y espacios en los periódicos, revistas, radios y televisiones.
Creo que no se puede catalogar de serpiente de verano la abundante programación de actos culturales, de mayor o menor envergadura, que se programan en nuestra ciudad en este tiempo veraniego. Claro que no se puede olvidar tampoco el acontecimiento extraordinario que ha tenido lugar en estos días en la Facultad de Teología de San Esteban, de los padres dominicos: ha sido ni más ni menos que todo un congreso internacional acerca de Francisco de Vitoria, Bartolomé de las Casas y otras reflexiones en torno a los derechos humanos. Aun siendo la nuestra una ciudad universitaria, no estamos sobrados de congresos de altura que convoquen a gentes de otras latitudes y nos enriquezcan con sus aportaciones intelectuales.
Pero yo quería hacer hoy referencia a la multitud de programaciones de entretenimiento, diversión, sí, pero al mismo tiempo de información y cultura. Hablando de universidad, no podemos dejar de hacer mención a las ya asentadas e ilustres Noches del Fonseca, que nos acercan diversos espectáculos de música, danza y teatro, fundamentalmente, a lo largo del mes de julio.
En segundo lugar, podemos mencionar la abundante programación, aunque sea de un alcance menor, cuyos actos colaboran a dar a conocer nuestra ciudad y nuestra historia, y a pasar unas noches agradables a cielo abierto en los jardines de Santo Domingo, con músicas de diversas procedencias y sensaciones. La programación lleva por título Plazas y patios, y se sitúa en la Plaza Mayor, en el Patio Chico, en la Plaza de Monroy y en la Cueva de Salamanca, además del ya nombrado de los Jardines de Santo Domingo de la Cruz.
Los cines Van Dyck, aparte de concluir el ciclo de Opera de la temporada, ofrecen dos series de películas en los meses de julio y agosto, con diversas bonificaciones. Se trata de una serie de cine español y otra oferta de cine en versión original, con películas de auténtica calidad, que incluso no es fácil de ver en la temporada normal, acaso por falta de tiempo y sobra de ocupaciones.
Y, para terminar, creo que hay que hacer justa referencia al extraordinario evento de nuestra ciudad y diócesis hermana de Ciudad Rodrigo. Al celebrar este año el centenario del paso de San Francisco de Asís por esta significativa ciudad camino de Santiago de Compostela, han programado toda una serie de actividades culturales como conferencias, teatros, actos musicales y otros acontecimientos celebrativos, que van desde ahora mismo hasta el fin del año natural. Y en medio y por encima de todo, merece la pena destacar la magnífica exposición de arte sacro que se puede visitar en la Iglesia del Seminario, y que toma su inspiración en las muestras de Las Edades del Hombre, contando con piezas extraordinarias y una buena disposición, que ayudan a conocer la vida, obra y herencia del gran santo Francisco de Asís.
Un verano, por tanto, para no aburrirse, para estar entretenidos, y para aprovechar el tiempo los que no salimos fuera, o los que tenemos algún tiempo de estancia en nuestra ciudad y su entorno aun después o antes de gozar de unas merecidas vacaciones. Y que puede contribuir a dar a conocer a los familiares o turistas que nos visitan, el magnífico espacio artístico y el entorno cultural que caracterizan a nuestra ciudad universitaria a lo largo de todo el año.
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