La música ha desempeñado un papel fundamental en la vida de la corte. Por ejemplo, en el Barroco, la gran mayoría de compositores trabajaban contratados por mecenas que, por lo general, solían formar parte de la alta aristocracia o del clero. Los Reyes eran en muchas ocasiones los que se encargaban de subvencionar a los compositores para que generaran obras para ellos y su corte. Los compositores, lejos de conseguir hacerse ricos, tenían que vender o malvender sus obras impresas para conseguir algún ingreso extra.
En el Clasicismo, ya en pleno siglo XVIII, las monarquías exhibían a sus músicos y sus mejores composiciones para hacer ver al resto de las cortes la grandeza de su reino.
Uno de los grandes mecenas que conocemos es Luis XIV. Siempre estuvo rodeado de compositores ya que su afición por la música y la danza no era ningún secreto, así como tampoco lo era su pasión por Lully, compositor y bailarín italiano que estuvo siempre a su lado. Luis XIV es también conocido como "El Rey Sol", debido a una interpretación del Ballet de la nuit (1653) de Lully, donde se podía ver al monarca disfrazado de sol y al resto de los cortesanos girando en torno a él. Se le debe a este Monarca la creación de la primera orquesta llamada "los veinticuatro violines del Rey".
En Inglaterra George Frederick Händel fue el compositor elegido por el rey Jorge I para amenizar sus celebraciones. Años antes había escrito una obra para la celebración del cumpleaños de la reina Ana, lo cual le hizo recibir una pensión vitalicia. Más tarde permanecería en la corte al lado de Jorge II.
En cuanto a España, fue Felipe IV (1605?1665) el monarca que mayor importancia le dio a las artes. Su reinado fue clave para el desarrollo artístico aumentando las colecciones de música instrumental, impulsando la creación y transformación de instrumentos musicales, así como publicando manuales de música teórica y práctica. Felipe IV no sólo mostró interés por el mundo de la música sino que se interesó por todas las artes, de ahí que se conozca a ese siglo como Siglo de Oro en España.
Durante el reinado de Juan Carlos I la música clásica ha contado con el apoyo de SS.MM. Ha sido sobre todo gracias a la afición de la Reina Doña Sofía, la cual, como gran aficionada, melómana y amiga de varios compositores ha impulsado los valores de la música acudiendo a muchos conciertos de relevancia en nuestro país y a los estrenos del Teatro Real. El Rey, por su parte, no se ha pronunciado en cuanto a su gusto por la música, aunque todo parece indicar que no es una de sus mayores aficiones a pesar de su asistencia a los conciertos cuando el protocolo lo exige.
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