En las Navidades, fiesta y vacación,
madruga muy poco mi amigo Ramón.
Y con esfuerzo, quería escribir mejor
la carta a los Reyes en esta ocasión,
por eso en el cole muy bien lo aprendió
con muy buena letra y sin un borrón.
Escribió el mensaje con mucha emoción,
pedía muchos cuentos, y un veloz avión,
la vela de un barco que se le rompió,
un rompecabezas y un acordeón.
Y para los niños sin habitación
un pijama nuevo y un grueso albornoz,
- “¡que no pasen frío!” - y mucho turrón,
un pavo relleno y algún polvorón,
- “¡que no tengan hambre!” -, y un rojo camión,
y muchos juguetes también les pidió.
Cuando había acabado, con satisfacción
la mandó a los Reyes, a su dirección.
Y así se despierta con mucha ilusión
a ver si le deja el sabio Melchor
junto a los zapatos que tan bien limpió,
y a todos los niños, lo que él escribió.
Mercedes Sánchez
FELIZ NAVIDAD.
PAZ en el mundo y en los corazones.
La fotografía es gentileza de José Amador Martín, a quien se la agradezco.
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