Javier Hernández: "La clave del partido han sido los últimos 20 segundos, no hemos sabido manejarlos"
El entrenador del Piensos Durán Albense, Javier Hernández, analiza la eliminación del equipo en la Copa del Rey frente al Spínola Chamartín, señalando como clave los errores de gestión en los últimos 20 segundos de un partido que tenían controlado.
La eliminación del Piensos Durán Albense en la Copa del Rey frente al Spínola Chamartín ha dejado un sabor amargo en el vestuario de Alba de Tormes. Un partido que parecía controlado se escapó en un suspiro, y la tanda de penaltis, descrita por el propio entrenador como una "lotería", dictó sentencia. El técnico, Javier Hernández, ha analizado en profundidad un encuentro marcado por los altibajos y, sobre todo, por un desenlace fatídico en los últimos segundos.
El equipo salmantino comenzó el partido de manera arrolladora. Durante los primeros diez minutos, el plan de juego funcionó a la perfección, generando múltiples ocasiones y logrando una ventaja de 0-2. "Salimos con las ideas muy claras de lo que teníamos que hacer, de cómo tenía que ser nuestro ataque", ha explicado Hernández, subrayando la superioridad inicial de su equipo. Sin embargo, ese dominio se fue diluyendo. "A partir del minuto 10, pues no tan claros en el ataque, dudábamos un poco en defensa, nos empezaron a hacer más daño ellos", ha admitido el entrenador.
Oportunidades perdidas y un final de infarto
Pese a las dudas, el Piensos Durán Albense supo reponerse a los empates del rival, llegando a colocarse con un favorable 2-4 en el marcador. Fue en ese momento cuando el partido pudo haberse sentenciado definitivamente. El técnico ha lamentado las ocasiones desperdiciadas que habrían evitado el sufrimiento final. "Tenemos 2 ocasiones muy claras para matar el partido y poner el 2-5, el 2-6. No somos capaces", ha señalado con frustración.
Lo que vino después ha sido una lección de cómo un partido puede cambiar en un instante. El análisis de Hernández se centra en un momento concreto que lo cambió todo. "La clave de este partido son los últimos 20 segundos, que no somos capaces de manejar esas situaciones, que a un equipo en segunda B se le exige", ha sentenciado. Un saque de banda a favor, gestionado con la intención de mantener la posesión, se convirtió en una pérdida que propició el 3-4. Tras un tiempo muerto para calmar los ánimos, otro error decantó la balanza: una falta a favor con el balón en movimiento se transformó, reglamentariamente, en un libre directo en contra que supuso el 4-4 a falta de dos segundos.
La prórroga y la mirada puesta en el futuro
La prórroga, según el técnico, "no tiene mucho impacto en el juego", describiéndola como "bastante plana" y sin ocasiones claras por parte de ninguno de los dos equipos. La eliminatoria se decidió desde el punto de penalti, donde la suerte no sonrió al conjunto de Alba de Tormes.
A pesar del duro golpe, Javier Hernández ya mira hacia adelante. El equipo tiene una oportunidad inminente para redimirse y transformar la decepción en energía positiva. "Esa rabia que tenemos por dentro, esa frustración, pues sacarla el domingo en pista y traducirla en querer jugar, en querer ganar, y llevarnos los 3 puntos", ha concluido el entrenador, marcando el camino para el próximo compromiso liguero.
