FEVESA denuncia el "caos absoluto" de la tarjeta BUSCyL y no descarta movilizaciones

La Federación de Asociaciones de Vecinos, Consumidores y Usuarios de Salamanca (FEVESA) ha alzado la voz para denunciar el "caos absoluto" generado por la implantación de la nueva tarjeta BUSCyL. La organización vecinal advierte de que no descarta convocar movilizaciones si la Junta de Castilla y León no ofrece soluciones urgentes a los graves perjuicios que esta medida está ocasionando a miles de usuarios del transporte interurbano en la provincia.

Según el comunicado emitido por FEVESA, lo que debía ser un avance para fomentar el uso del transporte público se ha transformado en un problema diario para los ciudadanos. La federación detalla una serie de deficiencias graves que afectan directamente a los viajeros:

• Los usuarios ya no pueden reservar plaza con antelación, generando una gran incertidumbre.
• No es posible comprar billetes en la página web utilizando los códigos QR.
• Las taquillas permanecen cerradas, eliminando una vía de compra y consulta presencial.
• Los viajeros se ven obligados a esperar durante horas en las paradas sin ninguna garantía de poder subir al autobús.

Desde FEVESA se atribuye esta situación a una puesta en marcha "precipitada, sin previsión y sin medios suficientes" por parte de la Junta de Castilla y León. "No aceptamos que la falta de planificación de la Junta recaiga sobre los ciudadanos, que están pagando las consecuencias de un servicio mal gestionado y que, además, debe ser gratuito", subraya la federación.

El malestar, según la organización, está generando un "clima de indignación creciente", ya que el servicio es esencial para muchos trabajadores, estudiantes y personas mayores que dependen de él para acudir a sus centros de trabajo, de estudio o a citas médicas. Esta incertidumbre, afirman, supone un "grave perjuicio económico y social" para quienes no disponen de otra alternativa de transporte.

Por todo ello, FEVESA exige refuerzos inmediatos en las líneas saturadas, garantías de plaza para todos los usuarios e información pública y transparente sobre el servicio. La federación ha anunciado que continuará trasladando estas quejas a las instituciones competentes y reitera su advertencia: si no hay "respuestas claras y medidas urgentes", se plantearán convocar movilizaciones vecinales. "El transporte público es un derecho básico, y exigimos que se gestione con responsabilidad, eficacia y pensando siempre en el bienestar de la ciudadanía", concluye el comunicado.