FOTOS | Los Molinos, el centro en Puente Ladrillo que transformará la acogida residencial en un hogar

Durante la visita a las obras del futuro centro de protección 'Los Molinos', la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, Isabel Blanco, ha desvelado un proyecto que busca redefinir el concepto de acogida residencial, al tiempo que ha lanzado una dura crítica contra la gestión del Gobierno central en materia de menores no acompañados. Con una inversión de 5,5 millones de euros, financiada en parte por los fondos Next Generation, y 450.000 euros para el equipamiento, estas nuevas instalaciones no solo sustituirán al centro actual, sino que implantarán un modelo pionero en la provincia basado en la calidez y la cercanía de un verdadero hogar.

El objetivo principal, según ha explicado la consejera, es abandonar la idea de los macrocentros para crear entornos más íntimos y familiares. "Uno de los grandes objetivos que nos marcamos esta legislatura fue el transformar el modelo de atención, asimilar estos centros de protección que tenemos, lo más parecido a un hogar, lo más parecido a una vivienda, a una casa", ha afirmado Blanco. Este principio se materializa en una estructura innovadora que marcará el día a día de los 32 menores que albergará, la misma capacidad que el centro actual.

Un hogar dividido en unidades de convivencia

La clave del nuevo modelo reside en las 'unidades de convivencia'. El centro se organizará en módulos independientes, cada uno funcionando como una pequeña casa para un máximo de ocho niños. Cada unidad contará con habitaciones individuales y dobles, zonas comunes, jardín e instalaciones deportivas, buscando replicar un ambiente familiar estable y seguro. "Para ellos sea lo más parecido a una casa, a su casa, de los cuales los hemos tenido que sacar para tutelarlos y protegerlos", ha subrayado la consejera.

Además de estas unidades, el centro dispondrá de una unidad de primera acogida con cuatro plazas. Este espacio está diseñado para estancias temporales y breves, ofreciendo una respuesta inmediata a niños que necesitan ser separados de su entorno de forma urgente. "Los niños que por cualquier motivo tienen que salir rápidamente de su casa, tenemos que tutelarlos, tenemos que protegerlos, que tengan esa estancia temporal y breve en esa unidad de primera acogida", ha detallado Blanco.

El contexto de la protección en Castilla y León

La construcción de 'Los Molinos' se enmarca en una estrategia regional más amplia. El año pasado, el sistema de protección de Castilla y León atendió a cerca de 1.500 niños. De ellos, aproximadamente unos 750 se encontraban en centros residenciales, mientras que la otra mitad vivía con familias de acogida. Isabel Blanco ha recordado que la prioridad del sistema es siempre la reintegración del menor con su familia extensa, como tíos o abuelos.

Cuando esto no es posible, el acogimiento familiar se presenta como la mejor alternativa, aunque no siempre es fácil encontrar familias disponibles. Por ello, la consejera ha hecho un llamamiento a la generosidad ciudadana, destacando las dificultades añadidas que existen para encontrar un hogar a grupos de hermanos, menores con discapacidad o adolescentes. Es en estos casos donde centros como 'Los Molinos' adquieren una relevancia fundamental, ofreciendo un entorno de calidad dentro de los 81 centros de estas características que operan en la comunidad.

Dura crítica al reparto de menores del Gobierno

La visita también ha servido de plataforma para que Isabel Blanco expresara el profundo malestar de la Junta con el Gobierno de España por el reparto de menores migrantes no acompañados. La consejera ha calificado la distribución, que asigna 197 menores a Castilla y León frente a 31 a Cataluña o ninguno al País Vasco, como una decisión inaceptable.

"El reparto del gobierno es una imposición y es una cesión a los chantajes, a sus socios separatistas", ha sentenciado Blanco. Ha acusado al Ejecutivo de falta de transparencia y de utilizar a los menores con fines políticos. "¿De dónde salen esos números? ¿De dónde salen esos datos? Estamos hablando de personas. Y parece que el gobierno utiliza a los menores, utiliza los traslados de los menores y utiliza esta situación cuando mediáticamente más le interesa".

Se prevé que la construcción finalice a finales de este año. Tras el periodo de equipamiento, que cuenta con un presupuesto de medio millón de euros, el nuevo centro podría abrir sus puertas y acoger a sus primeros residentes a mediados de 2026, convirtiéndose en un referente de la atención a la infancia en la región.