Llegó el calor

Coincidiendo con la llegada en serio del calor aterriza en Salamanca “un gran proyecto energético que suministrará calefacción y agua caliente a más de 8.900 viviendas y 75 edificios terciarios de la ciudad a través de una red alimentada con biomasa.”, “con una inversión de 35 millones de euros financiados por la Consejería de Medio Ambiente” según el Ayuntamiento. La Junta añade “cofinanciada con fondos FEDER 2021-2027” aportados por la Unión Europea. “Se instalará una central de generación de energía térmica de 48 MW de potencia” (quemar), en suelo rustico común limítrofe a otro con Protección Cultural, junto a la A-62 y cerca del Cementerio.

Según el alcalde “tendrá efectos muy beneficiosos para la ciudad, como el ahorro de costes energéticos para los particulares y las instituciones, la disminución de la contaminación y el incremento del empleo o la consolidación de la imagen de Salamanca como ciudad verde y sostenible, que también ayuda para el acceso a fondos europeos y otras ayudas y subvenciones”. Teniendo en cuenta los proyectos y el objetivo de la Junta, parece mucha biomasa, “para 2030 es alcanzar los 236 km de redes con una inversión total de 229 millones de euros, que beneficiarán a 522 edificios terciarios y más de 59.000 viviendas, suponiendo evitar la emisión de 39.000 toneladas de CO2 al año.”

El aprovechamiento energético de la biomasa puede suponer interesantes ventajas. Como su balance cero de gases con efecto de invernadero a medio plazo, si todo el proceso se hace de la forma adecuada. Aprovechar residuos forestales puede jugar un papel importante en la prevención de incendios. También puede generar desarrollo y revitalizar zonas rurales. Por otro lado, los usos de la biomasa no pueden ser a cualquier precio, no es la panacea para solucionar el cambio climático o la dependencia energética. Reducir el consumo energético debe ser la máxima prioridad.

Los cultivos dedicados al aprovechamiento energético no pueden entrar en competencia con la producción de alimentos. También consumen agua, y no se soluciona la dependencia energética agravando su escasez. Además, se debe permitir con técnicas de agricultura ecológica, sin agroquímicos derivados del petróleo. En su transporte hacia los centros de consumo hay que evitar la contradicción de largos desplazamientos. Y las plantaciones forestales no son bosques, no se pueden considerar propiamente ecosistemas naturales por su bajo grado de biodiversidad. Se deben compatibilizar con el mantenimiento de ecosistemas, o agroecosistemas, previamente existentes.

^{Número de días de calor extremo (temperaturas máximas superiores al 90 % de las históricas locales) entre el 1 de mayo de 2024 y el 1 de mayo de 2025. Análisis basado en datos del ECMWF ERA5 y el sistema del Índice de Cambio Climático (CSI).}

Casualmente el 2 de junio será el Dia de Acción del Calor, otro calor. Científicos de World Weather Attribution, el Centro Climático de la Cruz y la Media Luna Roja y Climate Central, evalúan la influencia del cambio climático antropogénico en las peligrosas olas de calor de los últimos 12 meses, el año y el enero más calurosos jamás registrados en la Tierra. Concluyen que el cambio climático antropogénico agrava el calor extremo peligroso para miles de millones de personas, prolongando y aumentando la probabilidad de eventos de calor. El 49% de la población mundial sintió al menos 30 días de calor extremo.

^{Anomalías de la temperatura media global anual en relación con una línea de base preindustrial (1850-1900), mostradas de 1850 a 2024. "Estado del clima global 2024", OMM-N.º 1368.}

Coincide con otro informe de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) prediciendo el clima del planeta de los próximos cinco años. Apunta niveles de temperaturas récord o cercanos a ellos, acrecentando los riesgos climáticos y sus consecuencias para las sociedades, las economías y el desarrollo sostenible. Respecto a las precipitaciones prevista de mayo a septiembre del período 2025-2029 en comparación con la referencia de 1991-2020 sugiere pluviosidad superior a la media en el Sahel, norte de Europa, Alaska y norte de Siberia, y condiciones más secas en la Amazonía. Ha sido la semana del calor.

^{Planta de energía de calefacción de biomasa Werl en Alemania.}