La Basílica de la Anunciación permanecerá abierta "hasta que pase el último visitante" este fin de semana

Alba de Tormes se adentra hoy en un fin de semana de gran intensidad y afluencia de visitantes con motivo de la veneración pública del cuerpo de Santa Teresa de Jesús. La expectación es máxima, no solo por la oportunidad de acercarse a la figura de la mística, sino también por los eventos programados, que buscan dar cabida a la masiva respuesta de fieles y peregrinos.

Una procesión para la historia

El punto álgido de las celebraciones externas llegará el sábado a partir de las 19:00 horas, con una procesión que portará la imagen de Santa Teresa por las calles de la villa ducal. Este acto se anticipa como muy especial, no solo por su celebración en el mes de mayo, rompiendo la costumbre de los tradicionales desfiles de agosto y octubre, sino por la extraordinaria participación que se espera congregar.

Numerosas hermandades y agrupaciones han confirmado su asistencia, reflejando la profunda devoción que Santa Teresa despierta más allá de las fronteras albenses.

El itinerario previsto para la procesión del sábado es el siguiente: Salida desde la Basílica, Plaza de Santa Teresa, Bajada Santa Teresa, Plaza Mayor, Calle Manterola, Calle Bulevar, Calle Carlos III, Calle Nueva del Reloj, Calle Resbalón, Plaza de la Leña, Calle Paloma, Calle Colón, Calle Barco, Calle Padre Cámara, Calle Pizarro, Plaza de Santa Teresa, y entrada en la Clausura.

Es importante recordar a los fieles que la veneración del cuerpo de Santa Teresa se interrumpirá durante las celebraciones litúrgicas que tengan lugar en la iglesia y también durante el transcurso de esta procesión.

Novedad: Veneración nocturna sin hora de cierre

Una de las grandes novedades para este fin de semana, motivada por la gran afluencia de público esperada, es la flexibilidad en el horario de veneración durante las noches. Tanto el sábado como el domingo, no habrá una hora de cierre establecida para acceder al cuerpo de Santa Teresa de Jesús en la Basílica de la Anunciación.

Según ha explicado la Orden de los Carmelitas Descalzos, serán los propios peregrinos quienes marquen el final de la jornada de veneración, ya que "la puerta de la Basílica de la Anunciación no se cerrará hasta que haya pasado el último visitante". Esta medida busca facilitar que todas las personas que se desplacen hasta Alba de Tormes tengan la oportunidad de vivir este momento de recogimiento y oración ante la Santa.