La gran preocupación del Ayuntamiento, Policía Local incluida, fueron las residencias de ancianos
España está viviendo el ‘día después’ del histórico apagón eléctrico que afectó a toda la Península Ibérica en la jornada del lunes, con una duración bastante variable. Mientras que en algunos lugares la electricidad no regresó hasta la madrugada del lunes al martes, en Ciudad Rodrigo el corte fue de ‘sólo’ 4 horas y media, desde las 12.33 horas hasta en torno a las 17.00 horas (en algunos barrios volvió minutos antes de las 17.00 horas, mientras que en otros se demoró un poco más).
Con el condicionante de la celebración del Lunes de Aguas, lo que propició que la tarde fuese festiva por ejemplo a nivel comercial, el apagón apenas provocó incidentes de relevancia, al menos según los avisos que llegaron hasta la Policía Local, como explica a Ciudad Rodrigo Al Día el delegado de este servicio, Rubén Benito. Por un lado, el apagón dejó atrapado en un ascensor de la calle Sánchez Arjona a un hombre, dándose aviso a la Policía Local, pero cuando llegaron los agentes el hombre ya había sido ayudado a salir por unos vecinos.
Un poco más tarde (sobre las 15.00 horas), al ir a salir una trabajadora del edificio de la Seguridad Social situado en la Avenida Conde de Foxá cuando finalizó su jornada laboral, se encontró con que no podía hacerlo al no poder abrir de ningún modo la puerta automática, teniendo que ser auxiliada por la Policía Local.
Precisamente, las puertas automáticas fueron uno de los quebraderos de cabeza en la jornada del lunes, tanto a nivel de particulares (según explica el teniente de alcalde Ramón Sastre, el Ayuntamiento ayudó a abrir la puerta de un garaje a una persona que tenía que acudir a Urgencias) como de establecimientos comerciales a la hora de intentar cerrar, como señala el presidente de Afecir, David Bernal.
A nivel de Ayuntamiento de Ciudad Rodrigo, Policía Local incluida, la principal preocupación como apuntan Ramón Sastre y Rubén Benito fueron las residencias de ancianos (“se les dio prioridad”), realizándose ya en los momentos iniciales del apagón una ronda por todas ellas para ver si necesitaban algún tipo de ayuda. En el caso del Hospital de la Pasión, agentes de la Policía ayudaron a subir a un anciano a una planta superior (al no funcionar el ascensor).
Plan de contingencia
Según explica a Ciudad Rodrigo Al Día Ramón Sastre, una vez finalizó la jornada laboral del Ayuntamiento a las 15.00 horas (evidentemente para el personal municipal que trabaja con ordenadores finalizó de forma obligada a las 12.33 horas), hubo una reunión en la sede de la Policía Local a la que asistieron responsables de los servicios de Obras, Instalaciones Municipales, Jardines y Policía Local, así como de Aqualia, para establecer medidas de contingencia.
Al respecto, lo que más inquietaba era “asegurar el abastecimiento de agua” a la población (ya que se necesita de la electricidad para ‘tirar’ de la misma), trabajándose para tener operativas dos cisternas, especialmente para abastecer a los agregados de Águeda (incluido el Arrabal de San Sebastián) y Sanjuanejo, donde es más problemático desde el primer momento que no haya bombeo. Al respecto, la cuba de agua del Ayuntamiento también se fue a vaciar y limpiar, y quedó cargada de nuevo en un hidrante por si era necesaria (finalmente no lo fue).
Por otro lado, se contó con la colaboración de una empresa de Ciudad Rodrigo para tener preparado un camión con gasoil por si era necesario para abastecer generadores, al no estar operativas las gasolineras (en el caso de la gasolinera de Repsol de Ciudad Rodrigo, al depender su sistema de funcionamiento de sistemas generales de la compañía, su cierre fue más largo que el tiempo que duró el apagón en la ciudad).
Al registrarse también problemas con los teléfonos, los asistentes a la reunión de las 15.00 horas en la sede de la Policía Local acordaron volver a reencontrarse físicamente dos horas después, a las 17.00 horas, que a la postre fue justamente la hora a la que se recuperó el suministro eléctrico en Ciudad Rodrigo.
En ese instante, el Ayuntamiento volvió a realizar otra ronda por las residencias, que poco a poco recuperaron la normalidad (en el Hospital de la Pasión y la Residencia Mixta Provincial la luz tardó algo más en volver). A nivel de Ayuntamiento, Ramón Sastre resalta que el personal municipal de los distintos servicios que fue requerido “se portó fenomenal”, estando todo el mundo permanente localizado (por si había problemas con los móviles, acordaron permanecer en sus hogares por si eran requeridos).
Como decíamos al principio, el apagón coincidió con el Lunes de Aguas, lo que hizo que el parón ‘real’ para el comercio y la industria mirobrigenses fuese de alrededor de una hora y media (de 12.33 hasta que concluyeron la jornada laboral sobre las 14.00 horas), sin que haya constancia de problemas o incidencias graves, según indica David Bernal (como señala el presidente de Afecir, la situación hubiera sido más problemática en caso de no ser la tarde festiva).
Por cierto, que después de esas horas un poco convulsas, la celebración del Lunes de Aguas en Ciudad Rodrigo fue “súpertranquila”, según explica Rubén Benito, no habiendo constancia del más mínimo incidente (algo incluso inusual), pese a la gran movilización por parte de los mirobrigenses.