El Cristo del Silencio protagoniza el clásico Besapiés en su retorno a San Pedro-San Isidoro
Tras el Besapiés fue llevado a la parte trasera del templo, compartiendo espacio por primera vez con la Sábana Santa
La Hermandad del Santísimo Cristo de la Expiración de Ciudad Rodrigo tuvo en la tarde del Martes Santo la primera de sus grandes citas dentro del período de la Semana Santa, que este año serán una más de lo habitual por la incorporación de la procesión de la Sábana Santa. Esta primera cita fue el clásico Besapiés al Cristo del Silencio, que tuvo lugar a la conclusión de la 2ª jornada del Triduo que está acogiendo la Iglesia de San Pedro-San Isidoro, presidido por el capellán de la entidad, Ángel Martín Carballo, junto a Fernando Dias-Bailón.
Este Besapiés se desarrolló según los cánones habituales en los últimos años, es decir, realizando los fieles una reverencia a la imagen del Cristo del Silencio, que había sido descolgada del presbiterio de la Iglesia de San Pedro-San Isidoro por miembros de la Cofradía (para quienes Ángel Martín Carballo pidió un aplauso).
Lo relevante en esta ocasión es que la estancia en ese presbiterio había sido efímera, ya que el Cristo del Silencio acaba de volver a la Iglesia de San Pedro-San Isidoro con motivo de la Semana Santa, después de estar desde el mes de enero con motivo del Año Jubilar de la Esperanza en la Catedral de Santa María, como imagen de Cristo referencial en la Diócesis. A diferencia de cuando fue llevado, el retorno a San Pedro-San Isidoro para estos días (tras los cuales regresará a la Catedral) se ha producido de forma discreta por parte de la Cofradía.
En el Besapiés participaron los presidentes o altos responsables del resto de las cofradías de la Semana Santa Mirobrigense (excepto de La Cruz, que tenía su primera cita procesional un par de horas después), así como los ediles del Ayuntamiento Ramón Sastre y José Manuel Jerez, y un amplio número de fieles de todas las edades, que tras realizar la reverencia al Cristo (momento en que pudieron depositar un donativo), recibieron una estampa.
Antiguos y actuales responsables de la Hermandad del Santísimo Cristo de la Expiración fueron los últimos en realizar la reverencia a la imagen, que fue llevada a continuación a la parte trasera de la Iglesia de San Pedro-San Isidoro, compartiendo espacio por primera vez con el nuevo paso de la Cofradía, la Sábana Santa. El Cristo del Silencio permanecerá en ese punto hasta la noche del Jueves Santo, cuando debe procesionar por las calles de Ciudad Rodrigo.
