La ciudad cuenta con una extensa red de 9 depósitos, cuyo principal objetivo es garantizar la disponibilidad del agua potable en todo momento
La Zona de Abastecimiento de Salamanca forma parte del Sistema Nacional de Aguas de Consumo, identificada con el número 17296, y cubre una extensa red que abastece no solo a la ciudad, sino también a varios municipios aledaños. En el Día Mundial del Agua, que se celebra cada 22 de marzo, repasamos la red de abastecimiento en la capital charra.
La red de abastecimiento está compuesta por 310 km de tuberías de diferentes materiales (básicamente fundición dúctil, fibrocemento y polietileno) y diámetros variables, llegando hasta los 1.000 mm. El proceso de captación del agua es clave para garantizar la calidad del suministro. La obra de toma se localiza junto al estribo izquierdo del Azud de Villagonzalo, una estructura que permite la captación directa del agua del embalse. Esta toma se realiza a 5 metros por debajo del nivel del agua, lo que asegura una mayor calidad y estabilidad en el suministro, independientemente de las fluctuaciones en los niveles del embalse.
Además, el sistema está diseñado para ser resiliente. La toma incluye una alternativa superficial que puede ser activada en situaciones excepcionales. Para garantizar la óptima operatividad, la infraestructura está equipada con órganos de limpieza y control que permiten un funcionamiento sin interrupciones.
Una vez captada, el agua es conducida hasta la Estación de Tratamiento de Agua Potable (ETAP) de la Aldehuela. Este recorrido se realiza a través de una tubería de fundición dúctil de 1.200 mm de diámetro y más de 20 kilómetros de longitud, equipada con sistemas de ventosas, purgadores, desagües y válvulas de sobrevelocidad, entre otros elementos técnicos, que aseguran su perfecto funcionamiento.
Además de la toma en el Azud de Villagonzalo, existe una captación adicional en el río Tormes (Código 8940), lo que proporciona redundancia y refuerza la seguridad del sistema.
La ciudad cuenta con una extensa red de 9 depósitos, cuyo principal objetivo es garantizar la disponibilidad del agua potable en todo momento. Estos depósitos se dividen en tres tipos:
Depósitos Superficiales: Cetramesa, El Polvorín, El Ferial
Depósitos Semienterrados: Pinilla, Chinchibarra, Cañones
Depósitos Elevados: Rojo, Cetramesa Elevado, Pinilla Elevado
En conjunto, estos depósitos tienen una capacidad total de 131.683 m³, lo que permite almacenar una cantidad significativa de agua, asegurando que siempre haya suministro disponible para los usuarios.
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