El joven compositor salmantino Fernando Hernández, de 19 años, estrenará su segunda marcha procesional

La Joven Orquesta Sinfónica Ciudad de Salamanca estrenará en su concierto de este domingo 30 de marzo en el CAEM la marcha procesional 'Dulcis Porta Caeli'. La obra ha sido compuesta por el salmantino Fernando Hernández Castilla, de tan solo 19 años de edad. Esta composición está dedicada a la Santísima Virgen del Dulce Nombre de la Archicofradía del Rosario de Salamanca.

'Dulcis Porta Caeli' es la segunda marcha procesional compuesta por Fernando Hernández, nacido en Salamanca en el año 2005. Desde los cinco años cursa una formación musical que dio comienzo en la escuela municipal de música “Santa Cecilia” de Salamanca. Actualmente cursa sus estudios de trompeta en el Conservatorio Profesional de Música de Salamanca. Su interés por la música le ha hecho formar parte de distintas formaciones musicales: Felipe Espino, Tomás Bretón, Villamayor y Alba de Tormes.

Desde muy temprana edad este salmantino con raíces en Peñaranda de Bracamonte se ha sentido atraído por la Semana Santa, que se ha convertido en una de sus grandes pasiones. Esta pasión unida a la de la música y su admiración hacia las marchas procesionales le ha llevado a realizar dos composiciones: “Salve, mi Esperanza”, dedicada a María Santísima de la Esperanza de Peñaranda de Bracamonte y “Dulcis Porta Caeli”, dedicada a María Santísima del Dulce Nombre de la Ciudad de Salamanca.

El propio Fernando Hernández manifiesta a SALAMANCArtv AL DÍA: "Mi profunda pasión por la Semana Santa y la música procesional ha sido, desde siempre, una fuente inagotable de inspiración y devoción. Fue precisamente esa arraigada sensibilidad hacia estas expresiones de fe y arte lo que, al contemplar por primera vez la sagrada imagen mariana del Dulce Nombre tras su llegada a la ciudad de Salamanca, despertó en mí una emoción tan intensa que no dudé en rendirle homenaje a través de la composición de su primera marcha procesional".

El compositor salmantino revela el sentido de esta marcha procesional: "La solemnidad de su presencia, unida a la devoción que desde el primer instante suscitó en mi interior, hicieron que este acto creativo surgiera de manera natural, como una manifestación sincera de veneración y entrega. Así, movido por la admiración hacia su imponente belleza y el fervor que su advocación inspira, quise aportar, a través de la música, un testimonio de fe que acompañara su sagrado caminar en las procesiones, enriqueciendo con sones solemnes y emotivos el patrimonio musical de nuestra Semana Santa".