Porsiete, la distinguida empresa de Salamanca que une sostenibilidad e inclusión laboral para personas con discapacidad
Esta sociedad cooperativa ha logrado combinar de forma exitosa su compromiso con la Economía Social y la Economía Circular con un proyecto pionero que se inició en 2006
Porsiete Sociedad Cooperativa de iniciativa social y Centro Especial de Empleo es una empresa de Economía Social sin ánimo de lucro que desarrolla su actividad como Gestor de Residuos. Esa es la carta de presentación de esta empresa salmantina presidida por Pilar Rodríguez, quien concede esta entrevista a SALAMANCArtv AL DÍA, y que ha sido premiada como mejor empresa cooperativa en la XV edición de los Premios al Cooperativismo y la Economía Social convocados por la Consejería de Industria, Comercio y Empleo de la Junta de Castilla y León.
Esta empresa salmantina está autorizada desde el año 2006 por la JCyL para transportar, almacenar, preparar para la reutilización y reciclaje los residuos de aceite vegetal usado, ropa y calzado, aparatos eléctricos y electrónicos, tóner, pilas y placas solares potenciando la Economía Circular. Su proyecto se puso en marcha con la misión de crear y mantener un trabajo digno para personas con discapacidad con los valores cooperativos como pilar de referencia.
Entre sus objetivos destacan el de generar empleo de calidad para personas con discapacidad que les permita proyectar la vida y el futuro con dignidad, difundir la Economía Social, potenciar el trabajo en red, sensibilizar a los ciudadanos de la importancia de recuperar y reciclar los residuos, fomentar la Economía Circular y la formación permanente de los profesionales que están a su cargo.
La actividad diaria de Porsiete se centra en la recogida de aceite vegetal usado para su tratamiento y posterior reutilización como biocombustible, recogida de ropa a través de contenedores específicos instalados en la vía pública y su preparación para su posterior reutilización, servicio de recogida y transporte de aparatos eléctricos y electrónicos y la reutilización de aquellos que pueden volver a utilizarse y las piezas que pueden volver al ciclo productivo, y la gestión de residuos como pilas, tóner y placas solares.
Su labor no ha pasado inadvertida para la Junta de Castilla y León, que ha valorado su continuo crecimiento y adaptación a los tiempos. Además, el jurado ha reconocido su esfuerzo inversor y su contribución a la generación y consolidación del empleo con una plantilla de 26 trabajadores, de los que el 81% presentan alguna discapacidad y el 80% de la plantilla son mujeres, así como la incorporación de nuevas tecnologías a su proceso de trabajo.