Pilar Rodríguez, presidenta de Porsiete: “Salamanca fue la primera ciudad de España en tener contenedores de reciclado de aceite en la calle”

Pilar Rodríguez es, junto a su socia Inés Martín, el alma máter de Porsiete. Maestra de profesión y siempre vinculada a proyectos sociales y educativos, se lanzó a la aventura empresarial en el año 2006 con la idea de crear un centro especial de empleo para personas con discapacidad. A partir de ahí, todo ha sido un continuo crecimiento para esta empresa salmantina que le ha llevado a conseguir el premio como mejor empresa cooperativa otorgado por la Junta de Castilla y León. SALAMANCArtv AL DÍA conoce de primera mano a Pilar Rodríguez, que además fue homenajeada recientemente por la Diputación de Salamanca en el Día Internacional de las Mujeres Rurales.

- Pilar, ¿por qué decidió dedicarse a este tipo de actividad?

- La idea de montar un centro especial de empleo para personas con discapacidad nos llevó a pensar qué actividad sería la más apropiada. Después de pensarlo y buscarlo durante unos meses encontramos la actividad del reciclado de aceite vegetal usado. Nos animamos a ponerlo en marcha, aunque los primeros momentos fueron difíciles y duros porque no conocíamos nada del sector.

- ¿Y cómo lo solventaron?

- A través de otros ejemplos que fuimos encontrando a base de mucho indagar. Una vez que ya entramos en el en el sector pues vimos que efectivamente tiene relación con las fábricas de biodiesel y ellos también nos indicaron muchas cosas que nos sirvieron para ponernos en marcha, y a partir de ahí empezamos a rodar.

- Dentro de ese proceso de reciclado, ¿por qué optaron por el aceite?

- Vi que era un nicho de mercado que todavía aquí en Salamanca no se hablaba de ello y entonces pues nos pareció que podía ser una oportunidad puesto que era novedoso.

- Esa novedad también influiría en la población, a la que habría que concienciar para ese reciclaje.

- Claro. En el sector Horeca sí se estaba recogiendo pero a domicilio no se estaba llevando a cabo. Dimos toda la información al Ayuntamiento de Salamanca para explicarle el proceso de la recogida de aceite y lo vieron viable. Fuimos la primera ciudad de España en tener contenedores de reciclado de aceite en la calle. La Junta de Castilla y León, a raíz de esta iniciativa subvencionó a todas las ciudades para la implantación de este tipo de contenedores en la vía pública.

- Ese fue, por tanto, el primer éxito de Porsiete, que posteriormente amplió su abanico de actividades.

- Teníamos claro que había que diversificar y entonces nos metimos en el sector de ropa usada y textil, que ahora tiene mucha importancia porque la legislación a partir del 2025 exigirá que todos los ayuntamientos tengan contenedores en la vía pública para este residuo. Una vez que este apartado también empezó a funcionar nos iniciamos como gestores de aparatos eléctricos y electrónicos.

- Ese espectro de residuos implicará un alto grado de coordinación y eficacia por las peculiaridades de cada material.

- Claro, cada uno de estas áreas tiene su especificación, su metodología de trabajo, sus requisitos y su procedimiento. Hemos ido aprendiendo y especializándonos en cada uno de los sectores.

- Además, otro de los elementos diferenciadores de la empresa es que contáis en la plantilla con personal con algún tipo de discapacidad.

- Sí, somos una cooperativa de iniciativa social. Eso significa que no tenemos ánimo de lucro y que si hay beneficios se tienen que reinvertir en la propia actividad de la propia cooperativa. También quiero decir que no tenemos ánimo de lucro pero tampoco ánimo de pérdida, que eso siempre lo explicamos porque si no la actividad no se podría sostener. Ahora mismo el 81% de la plantilla tiene una discapacidad. Ese fue el objetivo de poner en marcha este proyecto.

- ¿Y cómo es el trabajo que desempeñan estas personas? Porque imagino que las discapacidades varían muchísimo de unas a otras y que el puesto de trabajo se debe adecuar a esas discapacidades.

- Es importante complementar a personas que pueden conducir con las que no, a las que pueden cargar con las que no, a las personas que oyen con los que no. Se hace todo un equipo en el que se van equilibrando las posibilidades.

- ¿Cómo es un día de trabajo en Porsiete?

- Comenzamos a las 8 de la mañana y cada área perfectamente sabe lo que tiene que hacer. Hay personas encargadas de la recogida siguiendo unas rutas establecidas. Todo se hace a través de un sistema informático con una app y una tablet que llevan los trabajadores en las furgonetas. Ahí reflejan todos los datos sobre qué recogen, a quién recogen o en qué contenedor, donde está ubicado y la cantidad de ese residuo que se ha recogido. Todo eso pasa directamente a la oficina, a la administración. Una vez que se recoge siempre hay un grupo que también está en las naves para descargar, para clasificar, para preparar para la reutilización e ir seleccionando con distintos criterios de calidades.

- Todos estos procesos de los que hablamos, imagino que están continuamente evolucionando y adaptándose a los nuevos tiempos.

- Eso es, hay que hacer esos procesos conforme a toda la legislación. Es importante deciros que todo lo que entra y lo que sale de Porsiete está pesado, de manera que todos los informes tienen que ser muy rigurosos.

- Recientemente ha sido premiada por la Junta de Castilla y León como mejor empresa cooperativa de la comunidad. ¿Qué supone para la empresa un premio de esta?

- Supone una satisfacción porque es el reconocimiento al trabajo de años, teniendo en cuenta además que en esos años ha habido momentos difíciles, sobre todo en los inicios. Además, es un reconocimiento a que la economía social funciona, que las cooperativas ahí estamos y que además es posible que las personas que tienen una discapacidad trabajen y lo hagan de una manera muy profesional.

- Y mirando hacia el futuro, ¿qué retos se plantea?

- La mente siempre está funcionando. Ahora uno de los proyectos más importantes que tenemos es el tema del reciclaje textil. Estamos muy empeñados en toda la parte textil que no sirve, que no se puede recuperar, que no se puede volver a utilizar. Encontrar dentro de la economía circular el poder lograr un subproducto. Ese es uno ahora de los objetivos prioritarios que tenemos.

- Para finalizar, y echando la vista atrás, ¿se podría decir que los objetivos con los que se creó Porsiete se están viendo cumplidos?

- Yo creo que sí. Hemos logrado crear empleo para personas con discapacidad, objetivo prioritario, y hemos logrado recoger 7 millones y medio de litros de aceite que no han ido a los ríos a través de las cañerías. Con la ropa pasa igual, desde 2011 hemos recogido 7.800.000 kilos que de no ser así habrían ido directamente a los contenedores de basura orgánica.