El Cristo de la Agonía Redentora 'como nuevo' para su V Centenario

El pasado 13 de septiembre la Real Cofradía de Cristo Yacente de la Misericordia y de la Agonía Redentora emitió un comunicado en el que se anunciaba la inmediata restauración de uno de sus titulares, el de la Agonía Redentora, con el objetivo de “garantizar la preservación y conservación de la sagrada imagen, símbolo de profunda devoción y fe en nuestra ciudad”. En menos de un mes, la talla que este año celebra su quinto centenario, ya ha sido devuelta al culto totalmente restaurada, luciendo esplendorosa y espectacular en la Capilla de la Verdad para contemplación de todos los hermanos y fieles hasta que sea ubicada en su crucero habitual.

SALAMANCArtv AL DÍA habla con el hermano mayor de la Real Cofradía, Roberto Sánchez Gómez, quien valora todo el proceso al que ha sido sometido el Cristo de la Agonía Redentora. “La restauración se decide aprovechando el marco del quinto centenario que celebraremos el año que viene”, explica, continuando dando detalles sobre el origen de la imagen en cuestión: “Recordemos que el Cristo de la Agonía es una talla anónima y que no tiene una fecha datada de ejecución. Pero, tomando ese año de 1525 como referencia por ser el año en el que concluye ese primer cuarto del siglo XVI dentro del que se enmarca esta creación, podríamos decir que tenemos la certeza de que se han cumplido 500 años de la ejecución de la talla. Además, coincide de alguna manera que la única restauración que se le ha hecho a la imagen fue hace treinta años”.

Durante estos años el Cristo de la Agonía Redentora ha ido sufriendo el inexorable paso del tiempo, por lo que se decide llevar a cabo su restauración, tal y como explica el hermano mayor: “La imagen requería de algunos trabajos de conservación y además había que consolidar las mejoras que se le hicieron hace treinta años. Se pidió un estudio previo al Taller Uffizi, que fue quien restauró la imagen la vez anterior. Nos pasaron un proyecto y a partir de ahí empezamos con la tramitación de los permisos oportunos, solicitando primero el permiso al Cabildo Catedralicio, que es el propietario de la imagen y a partir de ahí, todo se ha podido llevar a cabo y podemos tener el Cristo restaurado para la celebración de ese año tan especial para la Cofradía, para todos los cofrades y salmantinos”.

La restauración llevada a cabo por los Talleres Uffizzi ha consistido en afianzar las reintegraciones que se le hicieron en la anterior intervención, además de arreglar pequeños desperfectos que la imagen tenía fruto del desgaste lógico en una imagen tan antigua, tal y como detalla Roberto Sánchez: “No ha sido necesaria una restauración muy profunda, pero sí queríamos corregir algunos detalles para asegurar la conservación óptima de la imagen”. El hecho de dejar en manos “ajenas” una talla de incalculable valor artístico y sentimental, ha sido relativamente fácil porque “Uffizzi es un taller que ya conoce la imagen, ha trabajado con ella, son de garantía, sabemos cómo trabajan y por eso hemos contado con ellos una vez más”, afirma rotundo el hermano mayor.

El proceso se ha llevado a cabo con la mayor celeridad posible y se ha seguido muy de cerca por la Junta de Gobierno de la cofradía: “La restauración se ha llevado a cabo en una de las capillas de la Catedral y nosotros hemos podido hacer un seguimiento casi diario o prácticamente diario del avance de los trabajos. Aunque ha estado retirado del culto nosotros sí que hemos estado bastante pendientes de cómo iban avanzando los trabajos de restauración”.

Para Roberto Sánchez Gómez, el proceso de restauración ha concluido de manera muy satisfactoria: “El resultado creo que es excelente. Ya lo verán todos los cofrades y todo el salmantino que quiera y todos los fieles que se acerquen hasta la Catedral”.