"Queremos devolver a los habitantes de las zonas rurales la soberanía sobre su territorio, mediante el uso de tecnologías"

El próximo sábado, 7 de septiembre, a las 13:00 en la Sala de la Lonja de Salamaq, Julio de la Torre Hernández, abogado salmantino y secretario técnico de la Asociación Española contra la Despoblación volverá, como el año pasado, a insistir en un modelo de desarrollo económico para las zonas rurales con base en los datos que genera el medio rural y sus actividades principales, agricultura, ganadería, explotación forestal y turismo.

Según explica, el marco de la Economía del Dato y su gobernanza, desarrollada por la Unión Europea recientemente, permite, gracias al uso de las nuevas tecnologías, generar un ingreso pasivo a los habitantes del medio rural gracias a una organización denominada “Federación de Datos” cuya gobernanza, a través de la tecnología Blockchain podrá ser autocompositiva y descentralizada, por lo que denominan al proyecto, como un proyecto de Soberanía del Territorio.

Julio, tiene formación en Derecho Tecnológico e Informática Forenses por la Universidad de Extremadura y en Ciberseguridad y Ciberdefensa por la Universidad de Santiago de Compostela, es conocido comunicador por lo que sus conferencias suelen ser amenas y clarificadoras, sobre todo en una materia como esta cuyo lenguaje no está al alcance de todo el mundo.

"RURALyDAD: Desarrollo Autocompositivo Descentralizado en el Medio Rural". Este documento aborda un modelo innovador de gobernanza para las comunidades rurales, basado en tecnologías descentralizadas y principios de autocompositivos, algo complejo para mucha gente, ¿cuáles son las ideas principales de este modelo?

Julio de la Torre: Claro, con gusto. Nuestro modelo de gobernanza busca devolver a los habitantes de las zonas rurales la soberanía sobre su territorio, datos y decisiones políticas mediante el uso de tecnologías.

Para ello proponemos emplear tecnologías como la blockchain y las Organizaciones Autónomas Descentralizadas (DAO), que en unos años serán conocidas como lo son ahora el Wifi e Internet.

La idea es crear comarcas autocompositivas que se autogestionen y se adapten a su realidad geográfica y desarrollo tecnológico, promoviendo la colaboración y la autogestión. Es decir, que pasamos de un modelo basado en el municipio a un modelo basado en la comarca, pero siempre en el plano digital. Cuando decimos autocompositivas nos referimos a que serán los habitantes los determinen cómo se componen las comarcas, no como los municipios, las provincias o las Comunidades Autónomas que viene impuestas por el legislador.

Estas Comarcas van a generar recursos gracias a los Datos existentes en el territorio que ahora no se explotan y son aprovechados por las grandes empresas sin contraprestación alguna como ocurrió con los datos personales. Queremos que empiecen a pagar.

Es un modelo parecido al canon que pagan las empresas de producción hidroeléctrica a los Ayuntamientos de los municipios afectados por la inundación en la construcción de los pantanos. Entre las diferencias está que el pago no se hace al Ayuntamiento, si no directamente al ciudadano en su cuenta personal, su wallet, que no es más que un monedero digital que llevamos todos en el móvil.

La soberanía es un tema recurrente en su documento. ¿Cómo se aplica este concepto en su modelo?

La soberanía en nuestro modelo se aplica en varios niveles.

Primero, la soberanía territorial permite a las comunidades organizar sus estructuras de convivencia. La provincia, la comunidad autónoma y el municipio fueron diseñados por políticos en siglos pasados. Existen comarcas naturales de varios municipios y pertenecientes a varias comarcas y CCAA que tienen intereses comunes que pueden explotar mediante este modelo.

Segundo, la soberanía sobre los datos garantiza que la información generada sea propiedad de la comunidad y gestionada de manera transparente y segura mediante blockchain. Ahora, como decía antes, las farmaceúticas y las proveedoras de servicios al campo y la ganadería están instalando dispositivos (IoT, o internet de las cosas) gratis a cambio de los datos, sin que el titular de esos datos se entere o sea consciente. Es como cuando los ingleses fueron al desierto de Arabía Saudí a sacar petróleo cuando los árabes eran pastores de cabras y poco más, hasta que se dieron cuenta de que era el “oro negro”. Pues aquí está ocurriendo lo mismo con el oro del siglo XXI, los datos.

Tercero, la soberanía política se refiere a la capacidad de los ciudadanos de tomar decisiones sin intermediarios. En estos momentos tenemos tecnología para empoderar al ciudadano y reducir políticos y funcionarios (procedimientos administrativos) que pueden ser aplicadas con efectividad a pequeñas comunidades.

Este modelo de gobernanza, financiado por la Economía del Dato de cada territorio es lo que denominamos “Comarca del Saber Vivir”

Ha mencionado la tecnología blockchain y las DAO. Para aquellos no familiarizados, ¿cómo estas tecnologías contribuyen a su modelo de gobernanza?

La blockchain es una tecnología que permite la creación de registros inmutables y distribuidos. Esto significa que la información, una vez registrada, no puede ser alterada, y es accesible de forma segura y transparente para todos los miembros de la comunidad, si necesidad de largas colas, pedir cita, ir a una ventanilla o depender de un funcionario o un procedimiento administrativo largo y tedioso.

Las DAO son organizaciones que operan bajo reglas codificadas en contratos inteligentes, eliminando la necesidad de intermediarios. Estas características permiten que las decisiones se tomen de manera más eficiente, segura y justa. Dando una seguridad jurídica como nunca y evitando notarios y registradores que encarecen las operaciones mercantiles y las civiles con los costes de su intervención. Evitando sesgos políticos al reducir el número de estos al intervenir directamente el ciudadano en la toma de decisiones, control de su ejecución y policía del proceso.

Como decía, serán tan habituales estos términos como Wifi o Internet entre la población eun unos años.

En el documento se habla también de la "Economía de los Cuidados". ¿Qué supone este concepto y que importancia tiene en el modelo RURALyDAD?

La "Economía de los Cuidados" se centra en crear sistemas que prioricen el bienestar de las personas y el entorno. En el contexto de nuestro modelo, esto significa utilizar la tecnología para anticipar y satisfacer las necesidades de la comunidad, facilitando la cooperación y colaboración entre sus miembros. La identidad digital y la IoT (Internet de las Cosas) jugarán un papel crucial al proporcionar información precisa para la toma de decisiones, garantizando que los recursos se utilicen de manera óptima y sostenible en las “Comarcas del Saber Vivir”, es decir, que los recursos que se generen en la Economía del Dato de la Comarca serán invertidos en el Bienestar Psicosocial de sus habitantes.

Otro aspecto que destaca es la "gobernanza comunitaria de los activos rurales". ¿Podría explicarlo con más detalle?

La gobernanza comunitaria de los activos rurales implica desarrollar estrategias criptoeconómicas que permitan a las comunidades rurales generar valor adicional a partir de sus recursos. Esto puede incluir el uso de tokens y otros mecanismos descentralizados para gestionar y compartir beneficios derivados de los activos comunitarios, sin perder la propiedad ni derechos reales efectivos. El objetivo es empoderar a las comunidades para que puedan autogestionar sus recursos de manera más eficiente y equitativa.

Ahora es complejo de entender por mucha gente. En un futuro reciente será tan habitual como el uso de internet, la wifi o el whatsapp. Será como manejar una red social, visitar una página web o , enviar un whatsapp o utilizar el Bizum.

Cuando llegaron las cosechadoras al campo, los tractores, el jeep, y todas esas máquinas durante el siglo XX el campo dejó de ser ese medio olvidado y subdesarrollado para dar un salto cuántico pudiendo enviar a muchos de sus hijos e hijas a estudiar a la ciudad y progresar. Ahora viviremos otra primavera en el mundo rural gracias a las nuevas tecnologías aplicadas y el marco jurídico que la UE ha generado para ello.

Por último, ¿cuáles son los próximos pasos para implementar este modelo de gobernanza en las comunidades rurales?

El primer paso es la educación y formación en tecnologías descentralizadas para los miembros de la comunidad.

Luego, se debe desarrollar y adaptar la infraestructura tecnológica necesaria, como la implementación de plataformas blockchain y la configuración de DAO.

Paralelamente, es crucial fomentar una cultura de cooperación y participación activa entre los habitantes.

A medida que se implementen estos componentes, se pueden comenzar a desplegar proyectos piloto en diferentes comarcas para evaluar y ajustar el modelo según las necesidades y realidades locales.

Muchas gracias por esta conversación. Sin duda, su trabajo ofrece una visión innovadora para el desarrollo rural y la gobernanza descentralizada.

Gracias a usted por la oportunidad de compartir nuestro proyecto. Esperamos que este modelo contribuya a mejorar la calidad de vida en las comunidades rurales y sirva como ejemplo de las posibilidades que las tecnologías descentralizadas pueden ofrecer.