La Feria Medieval de Penedono se celebra bajo el bastión de su castillo

En el altiplano de la Beira Alta portuguesa, prácticamente equidistante de Viseu, Lamego y Guarda, el Castillo de Penedono domina el trazado de una típica villa beirã. Una tierra antiquísima, en tiempos llamada Pena de Dono, con un evidente patrimonio arquitectónico y arqueológico.

El Castillo de Penedono, de planta hexagonal y estilo románico-gótico, refleja la cualidad granítica de este enclave, situado a 923 metros de altitud, en la cima de un cirro. Fue ampliado por mandato del rey Manuel I a principios del siglo XVI, sobre una fortificación del siglo X. Es Monumento Nacional desde 1910, su fachada se conserva completa y en perfecto estado y, a sus pies, trascurre cada inicio de verano la Feria Medieval de Penedono, una de las más conocidas de la región.

Malabares, saltimbanquis, danzantes, magos, caballeros hábiles con la espada, todo eso encontraremos en la Feria Medieval de Penedono del 5 al 7 de julio. La Cena Medieval del sábado 6, en el edificio solariego de los Paços do Concelho, será uno de los puntos altos del evento.

La artesanía del berceo, hoy con un nuevo enfoque, podrá ser apreciada en los puestos de venta y en el Centro de Muestra y Divulgación de Productos Locales, así como todos los derivados de la castaña, que es un exlibris de Penedono, junto con el aceite de oliva virgen extra. La Ruta del Aceite es, precisamente, una de las tres señalizadas que se pueden recorrer en el concejo, todas circulares, de más de 10 km y dificultad media.

Las tabernas y los restaurantes de esta villa, -de unos mil habitantes, que estos días multiplica población-, estarán preparados para acoger a los que quieran disfrutar de una de las ferias medievales más consolidades y animadas de la región.

En esta comarca situada al nordeste de Viseu, donde acaba la Beira y empieza el Douro, todo evoca el pasado. Las necrópolis y dólmenes aquí descubiertos, pero también las huellas de los sefardíes que habitaron estas tierras durante siglos, presentes en cuentos, leyendas, dichos y pequeños hábitos cotidianos, así como en la toponimia.

Su Pelourinho, del siglo XVI, es de alto fuste, rico en detalles decorativos, símbolo de la independencia jurisdiccional de Penedono, un concejo de fuerte tradición señorial.

Para conocer mejor Penedono, es aconsejable una visita a la oficina de turismo, localizada bajo la silueta de su inconfundible castillo medieval, e informarnos sobre cómo obtener el Pasaporte Douro.

Penedono se encuentra a unos 210 km de la capital salmantina, desde donde se llega pasando por Fuentes de Oñoro, para seguir por la A25 hasta salir a la IP2 en Celorico da Beira, dirección Trancoso. La N229-1 nos lleva hasta Penedono, por una carretera en la que atravesamos pueblos de granito y avistamos embalses de aprovechamiento agrícola.