La imagen procesionó en la carroza que se está usando ahora en las procesiones de la Parroquia de Santa Marina
Cuando todavía faltan tres días para su aparición en el calendario litúrgico (el miércoles), Ciudad Rodrigo comenzó a celebrar en la mañana del domingo la festividad de San Isidro Labrador, en concreto en el Arrabal del Puente, donde siempre se mueve a la jornada dominical más cercana. Como es habitual, los actos comenzaron con una solemne eucaristía en la Parroquia de Santa Marina, que no contó con la presencia del párroco, Prudencio Manchado, que a esa hora estaba en la celebración de San Isidro en Águeda (este año se pusieron a la misma hora).
En su lugar, estuvieron dos sacerdotes ya jubilados, uno de ellos Bernardino San Nicasio, que fue el encargado de presidir la procesión que se desarrolló a continuación, en la cual San Isidro desfiló en la carroza que se está empleando desde el pasado mes de octubre en las procesiones de esta Parroquia (el año pasado San Isidro ya desfiló en carroza, pero era otra diferente).
La procesión tuvo como destino la travesía Clemente Velasco, donde se procedió a la habitual bendición de campos, rezando un fiel una oración antes de tomar la palabra Bernardino San Nicasio, quién realizó la bendición propiamente dicha, durante la cual pidió a San Isidro que “nos eche una mirada a la gente del campo”.
Los actos festivos debían haber tenido como mayordoma a María Ignacia Montero, pero al encontrarse enferma fue sustituida en la tarea de llevar las varas por su marido y una nieta. Asimismo, ellos fueron los encargados de recoger la placa de reconocimiento por su antigüedad en la Cofradía que se entregó como inicio del convite que tuvo lugar posteriormente en el salón parroquial. Junto a María Ignacia Montero fue distinguida Encarnación Rodríguez, que tampoco pudo asistir por enfermedad, recogiendo la placa una familiar.
La celebración de San Isidro en la Parroquia de Santa Marina contó con la presencia del alcalde Marcos Iglesias y los concejales José Manuel Jerez (que es presidente de la Cofradía del Santísimo, San Antón y San Isidro Labrador de la Parroquia), Víctor Gómez, Vanesa García, Carmen Lorenzo y Raquel Enríquez. Ante la ausencia de sacerdote, José Manuel Jerez se encargó de bendecir simbólicamente la mesa en el convite posterior.