¿Por qué a los salmantinos se les envía a ser operados con frecuencia a hospitales de Zamora, Valladolid u otros?

No voy a hacer un análisis técnico pormenorizado sobre la multitud de datos de población y asistenciales que “explicarían” al menos parcialmente la existencia de estas nuevas listas de espera quirúrgicas y estas decisiones administrativas de que tanto en el sector público como en el privado esté aumentando este trasvase de pacientes de unas ciudades a otras (en general dentro de la misma Comunidad Autónoma).

No estoy capacitado profesionalmente ni es este el espacio apropiado para un tema así. Solo quiero enfrentar el razonamiento de un ciudadano medio, su sentido común, con este galimatías de cruces y trasvases de ciudades y pacientes quirúrgicos.

La primera hipótesis que viene a la cabeza sobre la causa de que pacientes de una ciudad determinada sean operados en hospitales de otras ciudades, es la de que en una ciudad, por diversas razones, puede haber un mayor número de pacientes, en su totalidad o en algunas especialidades, que en otras ciudades. Y/o que en algunas ciudades haya menos recursos asistenciales o terapéuticos en cirugía que en otras. Además, este fenómeno, puede ocurrir tanto en la Sanidad pública como en la privada (sobre todo en la Pública, después de varios años de un claro proceso de privatización progresiva con trasvases parciales o totales de instituciones públicas a privadas)

El otro día conocí a una salmantina que necesitaba hacerse una operación máxilo-facial por un problema respiratorio y los actuales gestores de la Seguridad Social( al menos en Castilla y Leòn), en su línea de pasar actuaciones sanitarias de lo público a lo privado, han decidido que este tipo de operaciones se realicen solo en el ámbito privado. Como esta señora no ha previsto hasta el presente la necesidad o conveniencia de pertenecer a una sociedad médica privada, solo pudo plantearse ser sometida a esta operación privadamente; con el fuerte desembolso económico que para su humilde economía representa el coste de dicha operación.

Pero la última sorpresa previa a la operación la tuvo cuando el equipo médico privado le informa de que la operación se realizará en un hospital de Valladolid. ¿Por qué motivo?

La respuesta fue que tiene menos costes económicos en Valladolid que en Salamanca y que además los medios tecnológicos de la primera ciudad son mejores que los de la capital charra. ¿Cómo es posible- se preguntaba la salmantina- que una ciudad con una Facultad de Medicina con una existencia mayor de medio siglo y con un Hospital Universitario recién construido, tenga equipos quirúrgicos inferiores a otra ciudad de la misma Comunidad Autónoma?

La situación actual de la Sanidad española es tan caótica y cambiante que ningún fenómeno epidemiológico o de población explica por sí mismos este angustioso crecimiento de las listas de espera en cirugía y en otros servicios de asistencia sanitaria. Solo los intereses económicos de los grupos privados sanitarios, en continuo crecimiento, podrían explicar este desajuste súbito entre necesidades sanitarias de una ciudad y recursos disponibles.

No busquemos, pues, ninguna explicación racional a estos trasvases y a este incremento incesante de listas de espera en atención sanitaria. La realidad parece apuntar a intereses económicos de grupos privados sanitarios, como motivo principal de este desorden del Sistema Público de Sanidad.