Durante la gala se proyectó un vídeo con declaraciones de Arrabal en programas de televisión y en su casa de París
La Junta de Castilla y León entregó en la mañana del jueves en el Auditorio Miguel Delibes de Valladolid los Premios Castilla y León 2023, entre cuyos galardonados en esta 40ª edición se encuentra el ilustre dramaturgo Fernando Arrabal, “un personaje único y surrealista” que es “un mirobrigense más”, según apuntó la presentadora de la gala, debido a que fue en Ciudad Rodrigo donde pasó su infancia y adolescencia.
Fernando Arrabal, que ya tiene 91 años, no acudió a la gala en Valladolid, recogiendo el galardón en su lugar el alcalde de Ciudad Rodrigo Marcos Iglesias, de manos del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, quién fue el encargado de ir entregando las 7 distinciones de las que constan estos Premios.
De forma previa a la recepción del galardón por parte de Marcos Iglesias (quién viajó a Valladolid acompañado por Ramón Sastre y José Manuel Jerez), se proyectó un vídeo sobre Fernando Arrabal, con imágenes de Ciudad Rodrigo, para resaltar que llegó con 4 años a esta ciudad que le hizo hijo adoptivo y a la que regresó hace un par de años para coger ideas para una nueva obra. Dentro de estas imágenes, se mostraron la fachada del edificio de las Teresianas donde estudió, la Biblioteca de la Casa Municipal de la Cultura (con una selección de libros de Arrabal) y el Teatro Nuevo Fernando Arrabal.
En esa pieza se incluyeron intervenciones de Fernando Arrabal en programas de televisión, así como en su casa de París, o cuando le llevaron en ‘procesión’ por las calles de Salamanca, resaltándose que es “creador de un estilo singular e irrepetible, el movimiento pánico”, y que este Premio de la comunidad “en la que se forjó el genio” reconoce la “contribución a la lengua castellana” de Arrabal.
En su intervención para cerrar el acto, Alfonso Fernández Mañueco indicó que este Premio compensa “muchos olvidos injustificados”, apuntando que Arrabal es “uno de los preciados valores de nuestra lengua y nuestra cultura”, buscando “cambiar la realidad” mediante “una creación literaria singular, polifacética, heterodoxa, frecuentemente transgresora y siempre defensora de la libertad”.
Previamente, en el discurso pronunciado por el Premio de Ciencias Sociales y Humanidades, René Jesús Payo Hernanz, en representación de todos los premiados, se resaltó el “espíritu indomable” de Arrabal “ a pesar de los sufrimientos familiares vividos durante el franquismo”, siendo “la defensa de la libertad y la lucha contra cualquier tiranía, así como la denuncia de lo absurdo de la violencia de la guerra” los “rasgos que definen su vida y obra literaria, que más que patrimonio español es patrimonio mundial”. Asimismo, le dio las gracias a Arrabal “por tu ejemplo de libertad y por caminar por este mundo siempre conforme a tu personal criterio”.