Tres rutas para disfrutar la hermosura de la naturaleza en plena Sierra
Con la llegada de marzo, mes en el que llega la primavera, proponemos algunas rutas para poder disfrutar de este paraíso, una de las joyas de la provincia
La Sierra de Francia es uno de los lugares de la provincia de Salamanca donde disfrutar de la naturaleza es fundamental. Ríos, vegetación, caminos… entre sus bosques, hay una gran diversidad de rutas para poder disfrutar del lugar. De todos los tipos y para todos los públicos. Con la llegada de marzo, mes en el que llega la primavera, proponemos algunas rutas para poder disfrutar de este paraíso, una de las joyas de la provincia.
RUTA DE LOS TRES RÍOS
La Ruta de los Tres Ríos es un sendero circular, asequible a todos los públicos, que nace y termina en la Plaza Mayor de Sotoserrano. La ruta sale al encuentro de las desembocaduras de los ríos Francia y Cuerpo de Hombre en el caudal del río Alagón. En el trayecto, el caminante encontrará pequeños descansos para disfrutar de unas vistas sorprendentes.
Distancia: 8,41 km
Tiempo: 2 horas 25 minutos aprox.
Camino: Pie forestal y sendero
Dificultad: Fácil
SENDA ACCESIBLE PARA MOVILIDAD REDUCIDA
El parque natural de Las Batuecas-Sierra de Francia tiene dos itinerarios aptos para personas con movilidad reducida. Uno de ellos es conocido como senda de los Castaños Centenarios, parte junto al núcleo habitado de El Casarito (Nava de Francia). Atraviesa un extenso bosque de roble rebollo, para llegar hasta un grupo de castaños, algunos de ellos con más de 500 años de antigüedad. Cuenta con aparcamiento, puntos de descanso, miradores, paneles informativos, etc. Desde él se obtienen excelentes vistas de la Peña de Francia.
Distancia: 1,6 km
Tiempo: Puede variar
Camino: Adaptado a movilidad reducida
Dificultad: Fácil
CAMINO DE LOS TRASIEGOS
Las localidades serranas de San Miguel de Valero y Valero se asienta el primer tramo del Camino de los Trasiegos. El trazado señalizado, atraviesa frondosos bosques de encinares y castaños situados en ladera y ofrece espléndidas vistas del valle de las Quilamas. También permite recrearse con antiguas construcciones, testigos del duro quehacer de estas gentes, como una singular era construida con losas de granito donde se aventaba la cebada, o bancales dedicados al cultivo de la vid o el olivo. Su nombre “de los trasiegos” evoca a tiempos de transporte e intercambio de mercaderías, entre las que actualmente destaca la miel, producto estrella de esta zona.
Distancia: 10,11 km
Tiempo: Unas 4 horas
Camino: Pie forestal y sendero
Dificultad: Media