Echa el cierre la última ‘crónica de un pueblo’ en forma de boletín y tras 37 años recogiendo la vida puerta a puerta

Comenzó siendo una publicación local que pretendía recoger la vida en las calles, puerta a puerta, y acabo convirtiéndose en parte fundamental de la vida y el alma de la localidad, algo que se guarda como oro en paño en cada hogar y que ahora, tras décadas de esfuerzo y dedicación, pone su punto y final.

No han sido pocos los lamentos y casi las lágrimas que se han vivido en Macotera tras el anuncio de la desaparición del ‘Boletín Informativo’, una pequeña revista que, desde la humildad de sus redactores altruistas, ha logrado convertirse ya en parte de la historia de la Villa.

Eutimo Cuesta es uno de sus entregados creadores, alguien que le ha dedicado horas de esfuerzo y dedicación para que cada mes, fiel a su cita, pudiera salir a la calle y llegar a las manos de sus vecinos.

Tal y como explica Timi, como todo el mundo le conoce, el origen de esta publicación se forjaba “un domingo del mes de julio de 1986, saboreando una chato de vino serrano y degustando un pincho de jabalí en una taberna de la calle Gómez Ulla de Salamanca, (que ya no existe), donde brotó la idea de crear la Asociación Cultural “Amigos de Macotera”, y, un mes después, sacar a la luz el primer boletín informativo”.

Una reunión, en la que participaba un nutrido grupo de personas, algunas ya desaparecidas, tal y como recuerda Timi. “De aquella tertulia de taberna, cabe recordar a don Sebastián Sánchez Sánchez, don José Flores Martín, Mª José Jiménez Jiménez, Diego Losada Cosmes, Teresa Flores Velasco, Ramón Jaime López Flores, Eloy García Bueno y Eutimio Cuesta Hernández. A lo largo de su trayectoria, se han incorporado otras personas, Juan Bueno Zaballos, Gaspar Blázquez Rodero, Juan Zaballos Jiménez (+), José Luis Rivero del Campo, doña Manoli del Teso Montes, Eugenia Lahera González, Mª Teresa Gutiérrez Bueno, Ramón Zaballos Bueno, Fernando Cuesta Martín, Juan Manuel González Hernández, Diego Caballo Zaballos, Ángel Blázquez Taboada, Mª Ángeles Iglesias Sebastián, Cristóbal Martín Bueno, Gerardo García Cuesta, Juan Bautista Blázquez y Mª Teresa Nieto Bueno. Todos ellos han contribuido, generosamente, a la gestión de la actividad de la Asociación Cultural “Amigos de Macotera” y, por consiguiente, a la acción del boletín informativo”.

Se trataba de una apuesta con una idea y una meta muy clara desde sus primeros pasos, “que sirviera de vehículo de comunicación y contacto entre todos los macoteranos. Su carácter cultural ha abierto la mesa de diálogo y la apertura de la comunicación de todo aquello que pueda revestir un interés; y, tras 37 años de existencia, se ha labrado una enciclopedia de saberes del pueblo, sus costumbres, fuentes de vida e historia lejana, que ha servido de manantial a tantas vivencias y relaciones de generaciones y generaciones, que nos definen como pueblo” añadiendo que, poco a poco, “el boletín llamaba a la puerta de todas las personas que se encuentran vinculadas al pueblo de Macotera por nacimiento, de allegados familiares y de profesionales que han dedicado su vida al servicio del pueblo”.

Desde aquellas primeras ideas y primeros bocetos se fue labrando un largo y exitoso camino, que se ha mantenido durante 37 años de manera ininterrumpida. “Se publicaba cada dos meses. Y este trabajo se ha podido llevar a cabo gracias a la colaboración desinteresada de varios escritores, que no citamos porque su firma figura en cada uno de los escritos que han aportado; gracias también a las subvenciones que nos entregaron la Cooperativa de Crédito de Macotera en sus inicios y Caja Duero, en su trayecto, y, sobre todo, a los socios que, con su generosidad, han determinado que esta obra cultural y social de lo nuestro haya tenido un recorrido tan largo y tan provechoso” explica Timi.

Un recorrido que finalmente, este mes de enero, llegaba tristemente a su final, decisión que suponía gran emoción para Timi: “La edad no perdona y tampoco hemos dado con la posibilidad de que el proyecto pudiese seguir avanzando. En ningún momento, soñamos que podíamos llegar tan lejos, hasta diciembre de 2023, y que podíamos engendrar una obra tan extensa e interesante, un legajo de 206 capítulos, en el que se recoge toda la hechura del pueblo y de sus gentes. Hemos caminado libres e independientes, sin condicionantes ni ataduras, porque nuestro propósito ha sido desde su inicios Macotera y los macoteranos. No hemos pretendido nada, solo ser útiles a aquellos que nos querían sostener en el camino y servir de apoyo”. Hoy la vida de esta localidad salmantina y sus gentes parecen estar más en silencio tras el cierre del boletín, algo que ya es recuerdo e historia que podrá ser consultada por las generaciones futuras en el archivo local. “Nos hubiera gustado que alguien hubiese tomado el relevo, pero todo lo que se inicia tiene un final…Este es el legado que la Asociación Cultural “Amigos de Macotera” aporta a los anales de su pueblo”.