Se ha demostrado que hay afición, ganaderías y toreros dispuestos a darlo todo por el futuro de esta fiesta
En una tarde anormalmente espléndida de temperatura, se ha celebrado la final de la 68 edición del Bolsín Taurino Mirobrigense. Quién sabe si un coso con más capacidad se hubiese abarrotado como lo ha estado hoy la plaza de tientas del Hotel Conde Rodrigo, pero sí se sabe que esta se queda pequeña y que Ciudad Rodrigo debería contar con un escenario apropiado para eventos de este nivel.
Había expectación por ver esta final, en primer lugar y como viene siendo costumbre en los últimos años por dirimirse con novillos lo cual le imprime seriedad e importancia y por otro lado porque el nivel de los aspirantes ha sido alto. Luego las cosas no han terminado de salir como se esperaba ya que el juego de los novillos, a excepción de el de Castillejo de Huebra, corrido en segundo lugar, no ha sido el esperado.
El primero de El Sierro muy limitado en sus fuerzas. Complicado y a la defensiva el bonito tercero de Antonio Palla. El que mandó Joseto de la ganadería de Andrés García tampoco ha acabado de romper en bueno. El quinto; añojo imberbe que no era el titular anunciado de Garcigrande y que por su pobre presencia ha provocado el enfado de los espectadores.
Es lógico que los aspirantes, condicionados por el juego de los animales, hayan alternado momentos brillantes con otros de menor nivel. Con el primero el cauriense Manuel León ha ido de menos a más dejando sus mejores muletazos en la última intervención, justo lo contrario que Salvador Herrero, más seguro y templado al principio bajando su actuación al final.
Con el mejor novillo de la tarde hemos visto al salmantino Diego Mateos. Empieza toreando de rodillas en dos tandas con enjundia muy de verdad. Después ya erguido lo cuaja por ambos pitones en la faena que más ha calado en el público. Esto le vale para oficiosamente consolidarse como el favorito a triunfador. Con el mismo novillo el también salmantino Ángel Lázaro abrocha muletazos de indudable gusto en una faena de altibajos.
Venido desde Cáceres Julio Méndez ha vuelto a demostrar muy buenas maneras hasta el punto que pese a las complicaciones de su novillo ha dejado algunos de los momentos más toreros y rotundos de la tarde. Por lo visto hoy y en anteriores tentaderos este chico está en boca de los aficionados y matará con toda seguridad un novillo en el próximo Carnaval.
El jienense Alfonso Juan García y el portugués Gonzalo Luis Silva han protagonizado el mano a mano más competido e igualado de la tarde. Sin poder realizar faenas rotundas debido a la condición del novillo, sí han demostrado que pueden, deben y van a estar entre los elegidos.
Pendiente de la decisión del jurado termina esta edición del Bolsín Taurino Mirobrigense, en el que se ha demostrado que hay afición, ganaderías y toreros dispuestos a darlo todo por el futuro de esta fiesta.