Campos y calles en Macotera, llenos de aficionados y jinetes para vivir el tradicional encierro a caballo
Arrancaba pasadas las 10 de la mañana
Un año más, Macotera se ha llenado de vecinos, aficionados y jinetes para vivir el multitudinario encierro a caballo, último de los festejos taurinos matinales de estas fiestas patronales de San Roque 2023.
Más de un centenar de caballistas y multitud de espectadores han abarrotado tanto la plaza de toros como sus accesos, todo ello preparado dentro de un recorrido que, en su último tramo de camino al coso, ha vuelto a dejar una carrera final más que esperada.
El de este año se ha vivido más dispersado, con una salida que discurría campo a través y que llevaba a dos de los cuatro toros a escapar del recorrido guiado, teniendo que ser finalmente dormidos ante la imposibilidad de llevarlos hasta la plaza. Los otros dos astados completaban el circuito, generando cortes y quiebros ya en el albero antes de su entrada a corrales.
La nota triste de este encierro ha sido la cornada que sufría uno de los caballos por parte de un toro rezagado, lo que obligaba a la asistencia veterinaria de urgencia en el mismo lugar del suceso para atender al animal de la importante herida generada.
El punto y final de los eventos taurinos en la Villa se pondrá esta tarde, desde las seis y media, con la celebración de una corrida de rejones, protagonizada por tres novillos Utreros y tres de la ganadería Peñas Blancas, lidiados por los rejoneadores Sergio Pérez y Mario Pérez Langa, quién sustituye a Oscar Borjas que será finalmente baja en el cartel debido a una cogida sufrida hace dos días.