Dibujos tácticos en el fútbol, caros o más baratos...

La verdad es que no es fácil reflexionar a este respecto, por cuanto la tendencia es a elegir sistemas tácticos a gusto del consumidor, sin entrar en más detalles.

Pero, reflexionemos. Si en esta época los equipos tuvieran que jugar con “sistemas piramidales”, es muy posible que sus presupuestos serían monstruosos de elevados y de difícil desarrollo. Por ejemplo, jugar con 1.2.3.5., sería inaguantable para las economías de los clubes por cuanto contratar a 5 delanteros titulares valdría más de la mitad del presupuesto, y no está el horno para bollos.

Pongamos por caso la idea más arraigada de juego eficaz y bonito que se constituye, normalmente, presentarse a los partidos con un dibujo en 1.4.3.3., típico de los equipos grandes, Barcelona o Real Madrid. Ya el hecho de utilizar a tres puntas supone un coste que no todos los equipos pueden soportar. Otra cuestión es que engañemos al personal y juguemos con centrocampistas en vez de delanteros, una manera de disimular la propuesta. Y en realidad eso pasa, del mismo modo que los 3 centrocampistas de un sistema de esa naturaleza tienen que tener unas cualidades elevadas, no valen todos. Por supuesto, el factor dominante será el dinero a pagar por ese tipo de futbolista.

De ahí que nos acostumbremos enseguida al 1.4.4.2, donde la utilización de dos delanteros, más bien un punta y un media punta, es más asequible para las economías de los clubes. Y los cuatro del medio, pueden agruparse mejor defensivamente siendo de perfil defensivo más que en el sistema de 3.3. De hecho, uno de los pivotes puede resolverse con un defensa central con dotes de corte y distribución, entrando en detalles con menor costo que un medio centro del máximo nivel tipo Busquets o Rodrigo, pongo por caso. Por supuesto, el simple hecho de que esos 4 del medio campo se distribuyeran “en rombo” tendría que la “punta de ese rombo” sería un futbolista más creativo y por tanto más costoso para las arcas del club.

En general, ha habido momentos que el sistema imperante resultó el 1.4.2.3.1., era una manera de aprovechar “medias puntas” (que no delanteros ni centrocampistas) para poblar en esa zona del campo con jugadores de buen pie y manejo, arropados por dos “pivotes”, normalmente defensivos, y de los cuatro defensores algún lateral ofensivo que pudiera colaborar con el ataque. Lo que se traduce también en dinero efectivo. Pero con 1 delantero se tira adelante y 5 centrocampistas más o menos creativos se compite a muy buen nivel, lo cual equilibra la inversión a realizar.

Aquello de los “tres centrales”, más bien tres defensores de centro, es una buena solución para poblar el medio campo con 1 pivote por delante, dos laterales abiertos, y cuatro centrocampistas donde alguno de ellos “tenga llegada”, una manera de ahorrar en delanteros, al fin y al cabo los más costosos.

Y esa es la premisa fundamental, a más delanteros más dinero es necesario. A más centrocampistas creativos más presupuesto y mejores resultados. A más defensas acumulados, más protección y la inversión más controlada. Ahora bien, en la “Premier League” se están pagando 100 millones de euros por un defensa central como si fuera un delantero goleador. Quizás sea más fácil invertir en defensas que en delanteros, pero los creativos siempre valdrán mucho más que los destructores.

Y las plantillas van confeccionándose con estas premisas, aunque no se diga en público los dibujos tácticos que van a usarse en la temporada. Según sean los dibujos percibidos se descubre el carácter del entrenador y ellos también valen más o menos en función de su atrevimiento táctico.

Salamanca, 26.junio.2023.