'Buscando a Nebrija' triunfa en Villalba de los Llanos

En una ciudad tan pequeña como lo sería la Salamanca que conoció nuestro protagonista Nebrija seguro que tuvo que presenciar a sus 21 años, uno de los episodios más truculentos de La Guerra de los Bandos, el que protagonizaría la Señora de Villalba de los Llanos doña María Rodríguez de Monroy, más conocida como María la Brava, al vengar la muerte de sus dos hijos.

Años más tarde, el treinta de septiembre de 1476, con su buen hacer el agustino san Juan de Sahagún consiguió que se firmara la paz y se diera por finalizada la contienda. En la casa donde se rubricara el tratado se conserva una lápida conmemorativa con la siguiente inscripción latina "Ira odium generat concordia nutrit amorem" que nuestro humanista traduciría al castellano como "La ira engendra odio; la armonía engendra amor".

Y ocho años contaba, en la fecha de esa firma, el otro protagonista del montaje "Buscando a Nebrija", Juan del Encina que además fuera alumno de nuestro insigne gramático y del que se han cogido casi todas las piezas musicales que se interpretan en este montaje.

Y en la iglesia de Villalba de los Llanos, donde descansaría "María la Brava", se pudo disfrutar el domingo 23 de abril del montaje del grupo "Lazarillo de Tormes" en un día también señalado, Día de la Comunidad de Castilla y León, Día de Villalar de los Comuneros. Y otra coincidencia con nuestro protagonista Nebrija fue la rendición de los Comuneros en 1522 el mismo año de su fallecimiento y casi un año después del ajusticiamiento de Padilla, Bravo y el salmantino Maldonado.

En este día y lugar cargados de historia, el público asistente sumó, con sus agradecidos y fuertes aplausos, un éxito más a este proyecto gracias al esfuerzo, ilusión, entrega y trabajo de todas las personas implicadas en el mismo, impulsadas por el Área de Cultura de la Diputación de Salamanca.