La Junta de Castilla y León aclaró vía telefónica que la alcaldesa podía proponer pero no nombrar a un funcionario municipal para ocupar de manera accidental el puesto de fedatario público
Ante la baja médica de la secretaria actual ayer martes y la imposibilidad de nombrar un fedatario público este miércoles, automáticamente ha quedado convocado para el viernes próximo, 24 de marzo, a las 12.00 horas, el pleno extraordinario previsto en el Ayuntamiento de Vitigudino solicitado por los grupos en la oposición.
La convocatoria de la sesión surge de manera automática 48 horas después a la convocatoria inicial, según explicó un responsable de la Junta de Castilla y León a la alcaldesa de Vitigudino, Luisa de Paz, conversación de la que también fue testigo el portavoz del PSOE, Grupo en la oposición, Germán Vicente.
En un principio la oposición pretendía que fuera la alcaldesa quinen nombrase a un funcionario de la plantilla como secretario accidental, pero según la Junta de Castilla y León “la alcaldesa puede proponer pero no nombrar”, por lo que la fórmula no era válida.
Hay que señalar que Luisa de Paz intentó pasadas las 14.00 horas de ayer que la Diputación nombrase un secretario accidental para celebrar el pleno, pero no fue posible dada la celeridad de la solicitud, “porque pasadas las dos de la tarde ya no había nadie en la Diputación para poder hacer el nombramiento”.
Así pues, como adelantaron en el escrito registrado a las 21.00 horas, los concejales de la oposición se personaron en el Ayuntamiento a la hora del pleno, pero ante la ausencia de fedatario público no pudo celebrarse, quedando convocada automáticamente una nueva sesión 48 horas después, pleno que, como adelantaba la alcaldesa a LAS ARRIBES AL DÍA, contará con fedatario público nombrado por la Diputación de Salamanca.
Como ha venido informando este periódico, entre los puntos a tratar está la toma de posesión de la concejala electa por Contigo Somos Democracia, Leticia Cuesta, en sustitución del recientemente fallecido Antolín Alonso Fernández; la dación de cuenta y ejecución de las distintas sentencias que anulaban varias sesiones plenarias anteriores, en las que se habían aprobado las dedicaciones y asistencias de los miembros de la Corporación, así como la derogación del ROM, entre otros puntos, y la reprobación de la alcaldesa.