¿Interés cultural?

Parece que la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de Castilla y León, de la que es responsable Gonzalo Santonja Gómez, ha propuesto que sean declarados Bienes de Interés Cultural los 190 vestigios franquistas que quedan en la comunidad. ¡Qué estupidez del Consejero! Porque el diccionario la palabra ‘estupidez’ tiene como significado torpeza notable en comprender las cosas o falta de entendimiento o inteligencia, y creo que ambos le son aplicables

La Ley 12/2002, de 11 de julio, de Patrimonio Cultural de Castilla y León, en su primer artículo señala que se debe proteger el Patrimonio Cultural de Castilla y León, para su investigación y transmisión a las generaciones futuras. ¿Qué es lo que ustedes pretenden trasmitir a las generaciones futuras?

El escritor estadounidense Patrick Rothfuss afirma que ‘El poder está bien, y la estupidez es, por lo general, inofensiva. Pero el poder y la estupidez juntos son peligrosos.’ En este caso ambos van juntos.

Los que se tienen por sabios, por lo general hablan sobre la sabiduría, no sobre la estupidez (aunque esta no implica ignoranacia), así que cuando el filósofo e historiador de las religiones alemán y discípulo de Hegel, Johann Ed. Erdmann, anunció en 1866 que su tema de exposición sería la estupidez levantó multitud de carcajadas en el auditorio, tal vez por tratarse de algo que podría llegar a develar algunos de nuestros defectos escondidos, de nuestras estupideces, de esas de las que nadie está a salvo porque las hay de muchos tipos, aunque pocos son capaces de reconocerlas públicamente.

En 2007 se reeditó el libro de austriaco Robert Musil ‘Sobre la estupidez’ y el escritor y guionista húngaro, Paul Tabori, en el año 2000 publicó ‘Historia de la estupidez humana’, en la que la describe como el arma más destructiva del hombre, su más devastadora epidemia, su lujo más costoso. Así que como pueden ver se ha pensado mucho sobre esta importantes cuestión.

Tabori, concluye su libro con las siguientes palabras:

• Sin embargo, el hombre psicológicamente sano no puede ser estúpido. Créase o no en el psicoanálisis y terapias semejantes, no es exageración afirmar que uno de los más importantes y de los más felices descubrimientos de nuestro siglo es el siguiente concepto, rara vez bien comprendido: Sabemos ahora que la estupidez es un problema de carácter médico... y por consiguiente, la estupidez es curable. Suponiendo, naturalmente, que alguien quiera ser curado.

Yo me pregunto que si existe la inteligencia artificial ¿existirá la estupidez artificial o esta es imposible de replicar desde la tecnología? Podría ser un nuevo reto, claro de para qué serviría?

En mi modesta opinión la pregunta en este caso no es si la solicitud presentada por la Consejería de Cultura, Turismo y Deportes de Castilla y León, está bien argumentada y justificada con relación a los requisitos que se deben cumplir según la ley, la pregunta apropiada sería ¿con qué finalidad? Porque no siempre las cosas que son legales son las que se deben hacer.

Hay que reconocer que el nuestro exalcalde Fernández Mañueco, está teniendo una legislatura movidita. Tal vez si el Sr. Gonzalo me explicara cual es esa finalidad de la propuesta, podría llegar a entender, aunque difícilmente llegaría a compartir. Lo que si les puedo asegurar es que en ningún caso me parece procedente el agresivo y desproporcionado comportamiento del procurador de Unidas Podemos, Pablo Fernández, más propia de un mitin callejero frente a un grupo de activistas, que una réplica en el seno de una institución en la que está representado el poder soberano de la comunidad. Veremos.