Escándalo en la Iglesia por las denuncias de abusos realizados por un jesuita durante más de 30 años

La Compañía de Jesús tiene intención de iniciar un procedimiento interno contra el jesuita esloveno Marko Rupnik, autor de mosaicos en iglesias de distintos países y acusado de abusos, y le ha prohibido cualquier ejercicio artístico público, especialmente, en edificios religiosos, tras aparecer nuevas denuncias que recogen comportamientos abusivos desde los años 80 hasta 2018.

Esta medida cautelar se añade a las ya existentes que eran la prohibición de cualquier actividad pública ministerial y sacramental, la prohibición de comunicación pública y la prohibición de salir de la Región del Lacio.

Según informa en un comunicado el delegado del provincial para las casas interprovinciales de Roma de la Compañía de Jesús, Johan Vershueren, en los últimos meses, la comisión que gestiona las denuncias contra Jesuitas de la Delegación para las Casas y Obras Romanas Interprovinciales de la Compañía de Jesús ha recibido nuevos testimonios y denuncias sobre Rupnik.

Muchas de estas personas no se conocen entre sí y los hechos narrados se refieren a periodos diferentes (Comunidad Loyola, personas individuales que afirman haber sufrido abusos de conciencia, espirituales, psicológicos o sexuales durante experiencias personales de relación con el padre Rupnik y personas que formaron parte del Centro Aletti). Por lo tanto, el delegado del provincial concluye que "el grado de credibilidad de lo denunciado o presenciado parece ser muy alto".

En concreto, precisa que los comportamientos denunciados tuvieron lugar en diferentes periodos comprendidos entre mediados de los años 80 y 2018, abarcando un periodo de tiempo de más de 30 años. La comisión propuso a Rupnik reunirse para tratar el asunto, sin éxito, por lo que le ha entregado un dossier de su trabajo, acompañado de las conclusiones sobre las diversas posibilidades de proseguir los procedimientos judiciales civiles y canónicos.

Tras estudiar el expediente y el dictamen de la Comisión, Johan Verschueren ha confirmado que la variedad de los testimonios recibidos, junto con lo que ya se conoce, "demuestra que deben ser tomados en serio y plenamente en consideración", y ha mostrado su "firme intención de proceder a tomar medidas para que no se produzcan situaciones similares a las denunciadas".

Por ello, ha comunicado su intención de iniciar un procedimiento interno dentro de la Compañía de Jesús en el que el propio Rupnik pueda dar su versión de los hechos y que podrá dar lugar a medidas disciplinarias. Además, como medida cautelar, ha endurecido las normas restrictivas contra él "prohibiéndole, por obediencia, cualquier ejercicio artístico público, especialmente en relación con estructuras religiosas (por ejemplo, iglesias, instituciones, oratorios y capillas, casas de ejercicios o de espiritualidad)".

Según indican desde la Compañía de Jesús, ha sido informado de la naturaleza y el contenido de las acusaciones, así como de la decisión tomada. Asimismo, la comisión ha comunicado también a los denunciantes y testigos la noticia de esta decisión.