5 claves para determinar qué tipo de préstamo se adapta a tus necesidades

No solo debemos comparar los distintos productos que ofrecen nuestras entidades de preferencia, sino también examinar una amplia gama de variables que pueden cambiar drásticamente nuestra experiencia.

Debido a que el proceso es complejo, hemos optado por elaborar esta breve lista donde compartiremos algunos aspectos que debes tener en cuenta antes de determinar qué tipo de préstamo es mejor para ti. Estos son los siguientes:

1. Estudiar nuestra necesidad

El primer paso es determinar en qué utilizaremos el dinero, cuánto necesitamos para cubrir nuestros gastos y para cuándo lo queremos en nuestra cuenta. Mientras que un préstamo tradicional puede tardar varios días en ser entregado debido al proceso de estudio, el financiamiento instantáneo se entrega en apenas unas horas.

Si queremos realizar un gasto trivial, como la compra de electrónica o línea blanca, es preferible optar por financiamiento con tasas de interés bajas y un tiempo de entrega promedio; si, por el contrario, enfrentamos una urgencia médica y debemos hacer un gasto grande en cuestión de horas, será mejor optar por un préstamo rápido, aunque sea más costoso.

2. Comparar las condiciones

Al igual que cuando compramos cualquier producto, el proceso de comparación es esencial para asegurarnos de elegir la mejor opción disponible. Esto incluye listar y contrastar los requerimientos de cada préstamo, los intereses, los costos asociados, el número de cuotas, la posibilidad de reestructurar o refinanciar el financiamiento, y hasta los castigos en caso de impago.

Actualmente existen plataformas para la comparación de préstamos, como PréstamosPerfectos, donde se listan las entidades que otorgan préstamos en el país, los productos disponibles, condiciones, requisitos y canales de contacto. Estas aceleran el proceso de comparación y permiten elegir un producto más adecuado a nuestras necesidades.

3. Contrastar nuestras finanzas

Nuestras finanzas determinarán si es necesario solicitar un préstamo grande, uno con un importe limitado o, idealmente, si debemos evitar endeudarnos. Cuando hablamos de finanzas, lo ideal es seguir una premisa sencilla: endeudarse no es una buena idea.

Aún así, existen variables que pueden hacer que solicitar financiamiento bancario sea una buena idea, por ejemplo, crear un historial crediticio, invertir en el crecimiento de nuestra empresa, o realizar pagos urgentes sin utilizar nuestro dinero directamente. Sin embargo, todo esto estará sujeto al análisis de nuestras finanzas, y a las metas de ahorro que tengamos de cara a los años por venir

4. Estudiar el plazo que se adapte a ti

Muchas personas tienen suficiente dinero para pagar sus deudas en poco tiempo, mientras que otras deben planificar un buen número de cuotas para poder evitar el impago. Al momento de solicitar un préstamo, es importante elegir uno que se adapte a nuestra capacidad de pago, ya que no hacerlo puede terminar en un aumento en la deuda, denuncias e incautaciones.

5. Solicitar ayuda de especialistas

Debido a la situación económica que atraviesa el país actualmente con la inflación, el aumento en los precios y el incremento en las tasas de interés, agrandar nuestras deudas es un proceso mucho más delicado que en el pasado. Por eso es recomendable acudir a profesionales antes de solicitar un préstamo.

De la mano de estos profesionales tenemos la posibilidad de estudiar a profundidad todos los puntos descritos anteriormente, con acompañamiento constante y asistencia en caso de que nuestra situación cambie de forma brusca.

Con estos consejos tendrás un mejor entendimiento sobre lo que implica elegir entre los distintos tipos de préstamos disponibles en el mercado, sin embargo, te recomendamos profundizar en cada punto antes de solicitar financiamiento bancario.