Las Cabañas y El Ventorro: distinción y mimo para una boda o evento inolvidable

El buen yantar, ese que apetece de principio a fin, con el mimo y el cuidado mas detallista en cada servicio, es algo que todo comensal busca como si de un santo grial fuera. Pero para quienes aún no lo encontraron podemos darles una respuesta, tan clara como contundente. El Restaurante Las Cabañas en Peñaranda.

Y es que más que una experiencia gastronómica, Las Cabañas es el buque insignia del buen hacer, de cuidado en cada plato y un servicio profesionalizado, algo que les ha hecho valedores de un reconocimiento que ya traspasa el ámbito comarcal, para ser todo un referente gastronómico y social en la provincia de Salamanca y en toda España.

Un establecimiento que abría sus puertas hace 137 años, arrancando así una travesía entre fogones que ha tenido una máxima mantenida día a día como gran norma de la casa: combinar lo mejor de la cocina tradicional con las innovaciones de la cocina moderna. Y ni que decir tiene que en el día más importante en la vida de una pareja como es su boda, este restaurante y su amplio y destacado equipo de profesionales se han ganado un lugar tan subrayado que hoy en día son elegidos por cientos de parejas cada año para celebrar su ‘sí quiero’ llegando desde innumerables puntos de la provincia, la comunidad o España, algo que ya les vale no pocos reconocimientos desde los espacios más importantes del mundo de las bodas.

Una casa fiel a su idea desde el principio, a finales del siglo XIX, cuando Peñaranda se situaba como un importante nudo de comunicaciones entre las dos Castillas, Extremadura, y el mercado, que en su día protegió el rey Juan II. Un destacado núcleo en el que se daban cita gentes que llegaban en carros y mulas a vender sus productos. Fue entonces cuando la “abuela Leandra”, una buena guisandera de pueblo, abrió un fogón más “porque estaban sobrados de mesones y posadas, debido a la importante afluencia de mercaderes”. Esa fue la semilla que hacia germinar Las Cabañas, donde ya se podían disfrutar delicias como la chanfaina, amarguillos y aguardientes, las perdices rojas o el tostón cuchifrito, manjares que aún perviven en esta casa, hoy regentada por los hermanos Manuel Vicente Díaz, Gerardo Díaz y su madre María Hernández Alonso.

Pero si hablamos así, con esta amplitud histórica que les ofrece el buen hacer a través de las décadas de servicio, ni que decir tiene que su gran joya de la corona es la finca El Ventorro, ubicada a escasos minutos de Peñaranda, que ya se ha convertido en el lugar ideal para disfrutar con comodidad y toda la intimidad que cada evento necesita, no solo en los banquetes de boda, sino las posteriores fiestas e incluso la organización de enlaces civiles.

Amplios y cuidados jardines, elegantes y amplios salones como el ‘María’ con capacidad para 450 personas, o el salón ‘Petra’ que puede albergar hasta 350 comensales, vienen a sumarse otras muchas estancias donde tienen cabida todo tipo de celebraciones y eventos, haciendo de este recinto un lugar único y exclusivo para ofrecer un festejo irrepetible y que se mantiene vivo, en constante evolución, adaptándose así a las necesidades y los gustos de los que ya serán recibidos a sus puertas como matrimonio, sin dejar a un lado una cocina de alta calidad, siempre sorprendente por la fusión entre lo más tradicional y la modernidad culinaria que marca la vanguardia de una cocina con sello de autor.

Un punto, el culinario, en el que los comensales van a poder disfrutar con productos de primera calidad, todos ellos de productores de la tierra, lo que supone una importante apuesta por apoyar al rico entorno que supone la comarca peñarandina y la provincia salmantina, ofreciendo con estos ingredientes una cálida fusión de sabores, grandes protagonistas en sus fogones, lo que se traduce en una gran variedad de platos sabrosos, en carnes y pescados, con identidad y que hacen de la celebración un momento especialmente recordado y con el regusto de la repetición, algo que se viene a completar con sus lujosos alojamientos, tanto en el Hotel del mismo nombre y ubicado en el mismo restaurante, como en sus apartamentos temporales.

En definitiva, si piensa en su boda, en cómo organizarla, en cómo ofrecer a los invitados una jornada irrepetible, el Restaurante Las Cabañas y la Finca El Ventorro son las opciones más seguras, con mayor tradición y seguridad, ya que aúnan todo lo necesario y más para que su boda, o también evento de empresa o familiar, se convierta en una cita que no se olvide nunca.