Vacunas otra vez

El lunes pasado se comenzaba la imposición de vacunas, contra el covid-19 y la gripe, en los centros de mayores, iniciando el proceso en la Residencia Asistida Provincial de Mayores de Salamanca, dependiente de la Diputación Provincial de nuestra provincia. Detrás irán otras residencias de mayores, hasta completar la totalidad de residencias provinciales.

Con ocasión de las contaminaciones por causa del virus covid-19 hemos redescubierto el valor y la importancia de las vacunas. Las vacunas salen al paso de diferentes males físicos, psíquicos o incluso morales. La acción de las vacunas es preventiva. Tratan de prevenir que el contagio de diversos males siga adelante.

El covid-19 nos ha ayudado a experimentar y comprender la eficacia de la prevención de la enfermedad. Ha habido una primera vacunación general, a la que han seguido dos vacunas de refuerzo. La que llega ahora es ya la cuarta dosis, que se aplica junto con la vacuna de la gripe que ha de recibirse todos los años.

Aparte de esos males de salud física, que son generalmente controlados por el Consejo Mundial de la Salud, encontramos otra serie de males que hace falta prevenir y ojalá fuera posible afrontarlos con algún tipo de vacuna.

Consideremos, por ejemplo, la amenaza de guerra nuclear presentada por el presidente ruso Putin. Putin, provocando la guerra de Ucrania, que pensó ganar en poco más de una semana, se encuentra ahora enrabietado porque la está perdiendo, con pérdida de tierras, personas y armas, en muchos casos obsoletas. Yo le ofrecería la vacuna de la Virgen de Valdejimena, que se venera en la región como abogada contra la rabia.

Lo mismo se propone para tantos lugares afectados por la violencia: Nicaragua, Nigeria, Sudán del Sur, Yemen del Sur, Irán, Afganistán, y tantos otros.

En España necesitaríamos vacunas para superar las divisiones entre partidos e ideologías. ¿Cómo podremos superar tantos enfrentamientos, tantos abusos de poder, tanto tráfico de drogas y de personas, tantos abusos sexuales, tantos homicidios de mujeres a manos de sus maridos, exmaridos, parejas o exparejas…?

A males morales hay que oponerles remedios morales, vacunas de tipo moral, que principalmente deben cultivarse en la familia, en la escuela, en medios de comunicación, etc. ¿Habrá empresas tan avanzadas que puedan poner en marcha vacunas con tanta rapidez como las que se crearon para combatir el covid? Ojalá.