INNOVA, la asociación que lucha por convertir la investigación en "un trabajo de verdad"

Daniel Justo Sánchez es el presidente de Jóvenes Investigadores No Valorados (INNOVA) de Salamanca, que nació en 1998 para convertir la investigación en “un trabajo de verdad”. “Generación tras generación se han ido perpetrando abusos laborales que son inconcebibles”, todo bajo “el estandarte de la vocación y la idea de que en un futuro vas a vivir muy bien”. Daniel cree que el espíritu ha cambiado un poco y cada vez se les va valorando más. Contractualmente siempre ha estado dentro de la USAL y reconoce que la comunicación entre la institución y la asociación es fluida.

Creen que en Salamanca es posible vivir “medianamente bien” con el sueldo de un investigador, aunque este varía en función de dónde provengan los presupuestos y de los años dedicados. “La ventaja es que en Castilla y León el nivel de vida no es tan alto como para que te sientas en dificultades”, aunque quienes se marchan a Madrid trabajan en condiciones mucho peores. “Algunos tienen que dejar la carrera investigadora porque les está costando dinero vivir allí mientras hacen la tesis”. Otra dificultad es la obtención de contratos predoctorales, que no siempre son suficientes. “El problema principal está en la gente que no lo consigue de ninguna forma y que se tiene que quedar investigando gratis y matriculándose para solicitar determinados contratos perdiendo dinero para trabajar”.

“Tanto el Rectorado como el Vicerrectorado de Investigación están en continuo contacto con nosotros”, y a través de su mediación también con los informes de la Federación de Jóvenes Investigadores Precarios (FJI). “Hacemos una labor que si se hiciera en todas las universidades sería maravillosa”, considera. Cree que es muy útil que más investigadores predoctorales y posdoctorales de Salamanca se impliquen en la organización para mejorar sus condiciones laborales y estar informados de los avances. De cara al comienzo de curso ya planean una serie de charlas en colaboración con la FJI para explicar los efectos de la nueva Ley de la Ciencia a los colectivos universitarios afectados por la misma.