La madrugada del Viernes Santo la 'Esperanza' se adentrará en la ciudad
Nuestra Señora de la Esperanza, uno de los pasos que saca la madrugada del Viernes Santo la Hermandad Dominicana. Foto: Alejandro López
Nuestra Señora de la Esperanza estrenará 24 piezas de candelería repujadas a mano y dos jarras, donadas por hermanos y devotos de la Hermandad Dominicana
Los imponentes pasos que la Hermandad Dominicana del Santísimo Cristo de la Buena Muerte, NP Jesús de la Pasión, Nuestra Señora de los Dolores (Piedad) y Nuestra Señora de la Esperanza pone en la calle la madrugada más esperada de la Semana Santa, saldrán de la iglesia del Convento de San Esteban para adentrarse en la ciudad. En su recorrido no faltará la estación de penitencia en la Catedral (entrada por la Puerta de Ramos y salida por la Puerta del Obispo) o su paso por la Plaza Mayor.
La belleza de los cuatro pasos, la forma de caminar los pasos o los enseres procesionales convierten a la procesión de la Hermandad Dominicana en una de las que más interés y devoción suscita. Después de dos largos años sin poder procesionar a consecuencia de la pandemia -a lo que se suma que en 2019 la lluvia truncó el desfile de la madrugada del Viernes Santo cuando salía la imagen de La Piedad-, esta Semana Santa será muy especial para las cofradías, también para la Hermandad Dominicana, entre cuyas novedades, está que el paso de palio de Nuestra Señora de la Esperanza estrenará 24 piezas de candelería repujadas a mano en el taller de orfebrería Orovio de la Torre y dos jarras. Las piezas han sido donadas por Hermanos de la Hermandad Dominicana, así como devotos de la Hermandad.
Imágenes titulares
La Hermandad Dominicana es una de las más veteranas de la Semana Santa de Salamanca, y una de las que cuenta con mayor número de hermanos, siendo fundada en el año 1944, año en el que también organizó su primer desfile procesional.
El Santísimo Cristo de la Buena Muerte (talla anónima, siglo XVII), representa a Cristo ya muerto en la cruz con los ojos cerrados y la cabeza reclinada hacia el lado derecho. Nuestro Padre Jesús de la Pasión, obra de Damián Villar realizada en 1945, representa a Cristo cargando con la cruz.
El escultor e imaginero salmantino también tallaría en 1951 la imagen de Nuestra Señora de la Esperanza, siguiendo los cánones de las dolorosas andaluzas. Desfila bajo palio, destacando el manto realizado a partir de vestidos para torear donados por Santiago Martín ‘El Viti’, Julio Robles y ‘El Niño de la Capea’, hecho por el que recibieron el reconocimiento como Hermanos Honorarios en marzo de 1986.
Y llegamos a la que está considerada como una de las mejores tallas que desfilan en la Semana Santa salmantina, Nuestra Señora de los Dolores (Piedad), obra de Luis Salvador Carmona en 1760, y en la que destaca la cuidada anatomía de Cristo y la expresión de la Virgen.
Culto a Jesús de la Promesa
La Hermandad Dominicana decidió recuperar el culto a Nuestro Padre Jesús de la Promesa mediante la realización del Ejercicio de las Cinco Llagas. En 1948, en el seno de la Hermandad, se constituyó la filial Hermandad de Penitencia de Nuestro Padre Jesús de la Promesa para dar culto a la imagen de dicha advocación que, a día de hoy, se encuentra ubicada en la Sacristía del Convento de San Esteban. Realizó su procesión en la noche del Lunes Santo de manera ininterrumpida hasta el año 1974, cuando dejó de procesionar.
Este año tendrá lugar el lunes, 11 de abril, en la Iglesia de San Esteban.