Pedaleando la Unión Europea por la educación y el medioambiente

De Saint-Valery-sur-Somme a Irlanda, de ahí a España llegando en ferri a Santander; hasta la frontera con Portugal por la comarca salmantina de Ciudad Rodrigo, atravesando la Beira dirección Lisboa, para cruzar el Alentejo y pasar de nuevo a España por Badajoz, con varias paradas extremeñas y llegada en tren hasta Madrid. Y de ahí, hacia el corazón de Europa.

El Tour de la Unión Europea en Bicicleta (L’Union Européenne à Vélo) es el nombre de una aventura educativa, que aúna eco-movilidad y pedagogía en el marco del viejo continente.

Jean Boujonnier es su protagonista. Este maestro de 41 años soñaba desde los 16 con este viaje y, tras un año de preparación de la logística necesaria, comenzó a vivir su sueño el pasado 1 de febrero, partiendo de su localidad natal -donde enseña como profesor de primaria-, la villa de Saint-Valery-sur-Somme, en el norte de Francia.

Durante cinco meses Boujonnier recorrerá 26 países de los 27 de la Unión (exceptuando la isla de Chipre), con el objetivo de potenciar entre sus alumnos y entre el público en general el conocimiento de las diversas culturas de la UE, con la esperanza de encontrar ideas inspiradoras y promover un estilo de vida ambientalmente sostenible. “El objetivo es dar a conocer la Unión Europea, sus países, sus idiomas, sus culturas, sus buenas ideas. También pretendo promover la eco-movilidad y divulgar comportamientos eco-responsables”, manifestó Jean Boujonnier el día de la partida.

Si todo sale según lo previsto, volverá al punto de partida el 1 de julio de este año, después de haber recorrido 16.400 kilómetros en 150 jornadas, aproximadamente, una centena de kilómetros diarios.

El tour se inició el pasado 1 de febrero en Saint-Valery-sur-Somme, donde recibió todo el apoyo de alumnos, compañeros y de la directora de la escuela Manessier-Corderies, donde imparte clases. También las autoridades municipales quisieron estar presentes. Los niños interpretaron la Oda a la Alegría, el himno de Europa, y le despidieron en varios idiomas.

Jean Boujonnier anima a todos, especialmente a la comunidad escolar formada por profesores y alumnos, a seguirle en las redes sociales y a través de su blog en este recorrido por Europa, desde donde comparte vídeos, fotografías y textos sobre los paisajes naturales y urbanos que va encontrando, la gastronomía que le sorprende en cada territorio y los amigos que va dejando en cada una de las localidades que visita.

En Castilla y León, Boujonnier ha compartido imágenes del Camino de Santiago, de Tordesillas o Ciudad Rodrigo. Ha estado alojado en la casa de la Fundación María José Celemín, en Castronuño (Valladolid). Ha cortado con su bici los amplios paisajes de la dehesa salmantina y, en Ciudad Rodrigo, ha comido patatas meneás y huevos con farinato.

De ahí pasó a Portugal por la comarca de Azaba, entrando en el concejo de Sabugal por Aldeia da Ponte.

En Sabugal ofreció una charla a los alumnos de la agrupación de escuelas del municipio y realizó con ellos, sus profesores y otros vecinos un pequeño tramo de su ruta en bicicleta.

En algunas localidades por las que atraviesa se han organizado charlas y debates con alumnos y profesores sobre la educación en la Unión Europea y sobre movilidad y medioambiente. No ha sido el caso de Castilla y León, a pesar de haber pedaleado por ella durante tres jornadas.

Boujonnier entró en la comunidad por Palencia desde Reinosa (Cantabria), llegando el primer día (etapa 13, 126 km) a Monzón de Campos (Palencia), el segundo (etapa 14, 101 km) a Tordesillas (Valladolid) y el tercero (etapa 15, 123 km) a Vecinos (Salamanca).

Sí se reunió con profesores y alumnos de Sabugal, la primera meta en tierras portuguesas. Desde ahí atravesó en diagonal el centro del país, pasando por Proença-a-Nova, Golegã y Cartaxo, para acabar en Lisboa.

Ha regresado a España accediendo por la frontera de Elvas-Badajoz, realizando varias etapas en Extremadura, pasando por Mérida, Zorita y Guadalupe, llegando a Castilla- La Mancha con parada en Talavera de la Reina, antes de coger el tren hacia la estación de Madrid-Atocha. En la capital, ha aprovechado para realizar algunas visitas culturales -al Museo Reina Sofía o a las naves del Matadero- y se ha reunido con alumnos y profesores del Instituto Francés.

Aunque el viaje ha sido preparado durante el último año, en realidad Jean Boujonnier empezó a idearlo con 16 años, cuando dibujó por primera vez sobre un mapa de Europa el itinerario de su viaje.

Después de haber vivido y enseñado durante 11 años en varios continentes, en países como Finlandia, Canadá, Chile, Ecuador o Australia, tuvo la certeza de que ahora era el momento. “Daré lo mejor de mí día a día, nunca me quejaré y haré de cada dificultad una fortaleza”, afirmó este trotamundos al comenzar su aventura, subrayando que quiere proyectar en la educación valores como la perseverancia, la superación personal, la confianza en sí mismo y en los demás, aunque tengan otros modos de vivir.

Además del contacto a través de su blog y de la página de Facebook que ha creado al efecto, se comunica cada día con sus alumnos y con sus compañeros profesores a través de la plataforma educativa digital con la que habitualmente trabajan, ya que esta iniciativa forma parte de un proyecto de aprendizaje a distancia de su escuela.

Ha financiado este proyecto con la aportación de varios patrocinadores y una recaudación de fondos dirigida al público general. Su presupuesto es de 20.000 euros, destinados esencialmente a la alimentación, el alojamiento, las eventuales averías de la bicicleta y los billetes de ferri y de tren.

Con sus 12 quilos de equipaje sobre la bicicleta, Jean Boujonnier ha dejado atrás el occidente de la península ibérica y pedalea ya por tierras aragonesas.

Los interesados en acompañarle podrán seguirle a través de la página de Facebook y del blog del proyecto.

Vídeo etapa 16, Dehesa salmantina-Portugal:

https://video.relive.cc/65139879001_relive-tracker_1645381809918.mp4?x-ref=site